El macrojuicio de las tarjetas black se complica. Los abogados defensores de buena parte de los 65 acusados por el uso de Visas presuntamente fraudulentas repartidas por Caja Madrid y Bankia entre directivos y acusados han  presentado una reclamación esta mañana para posponer los interrogatorios de todos sus testigos, lo que implicaría en la práctica suspender el proceso durante un mes.

La razón: que uno de los testigos de las acusaciones, el expresidente de Caja Madrid Jaime Terceiro –antecesor de Miguel Blesa-, ha sido citado a declarar por error el próximo 14 de noviembre, y no para hoy mismo como estaba previsto inicialmente en el calendario del proceso.

Las defensas esgrimen que no se puede garantizar el derecho a la defensa de sus clientes si uno de los testigos principales del ministerio fiscal declara con posterioridad a sus propios testigos.

El fiscal Anticorrupción, Alejandro Luzón, ha rebatido tales argumentos y ha subrayado que se pueden celebrar todos los interrogatorios de testigos, tanto de las acusaciones como de las defensas, según el calendario fijado. Y que, si el testimonio de Jaime Terceiro requiere volver a llamar a algunos de los testigos de descargo, que se haga.

“El señor Terceiro no fue citado debidamente para hoy. No es una estrategia del fiscal, no es que el ministerio fiscal se guarde un as en la manca. Se le citó para noviembre por error o confusión”, ha explicado Luzón. “Suspender el juicio durante un mes sí que vulneraría el derecho a un juicio sin dilaciones y a la defensa efectiva” de los acusados.

El tribunal del juicio, presidido por la jueza Ángela Murillo, ha deliberado sobre el orden definitivo de los interrogatorios de testigos, pero ha aplazado la decisión sobre el interrogatorio de Terceiro y el de los testigos defensores hasta el próximo jueves, cuando se reanudan las declaraciones de testigos.