Es su prioridad. Con ella ha concurrido a las elecciones y con ella logró imponerse con holgura el pasado 25-S. Sin embargo, a apenas unos días para ser reelegido como lehendakari, a Iñigo Urkullu se le empieza a enfriar su gran logro de la pasada legislatura. La economía vasca se contrae, los índices de desempleo aumentan y las recaudaciones de las tres haciendas vascas se quedan lejos de las previsiones. La primera, la economía, acumula ya tres trimestres de ralentización en su crecimiento y la segunda, el empleo, suma un trimestre de caída que aleja un poco más el gran objetivo del PNV: rebajar la tasa de desempleo hasta el 10% a lo largo del mandato que ahora se inicia. Por último, los ingresos por la recaudación de tributos concertados al cierre de este año se quedarán muy lejos de las estimaciones hechas a finales del año pasado, menos de la mitad de lo previsto.

El Instituto Vasco de Estadística EUSTAT ha hecho público hoy los datos de evolución de la economía vasca que muestran que la tendencia de crecimiento que parecía imparable desde 2013 comienza a tocar techo. La economía vasca venía creciendo desde comienzos de 2013 tras tocar suelo con una caída del 2,7%. La recuperación iniciada durante estos cuatro años, sin embargo, parece haberse frenado. A lo largo de 2016 Euskadi no ha dejado de crecer pero lo ha hecho a un menor ritmo. El último trimestre de este año el EUSTAT sitúa el repunte del PIB en el 3%, frente al 3,2% producido durante el segundo trimestre y del 3,3% de los tres primeros meses del año. La previsión de crecimiento de la economía vasca que ha fijado el Ejecutivo en funciones de Urkullu prevé cerrar el ejercicio con una mejora del 2,9% este año y una estimación para 2017 del 2,7%.

Pese a que el País Vasco registra los niveles de desempleo más bajos de España, la evolución del empleo en los últimos meses está siendo negativa. El paro ha aumentado tanto en agosto como en septiembre y en octubre. Según los datos del Ministerio de Economía y Hacienda los dos últimos meses de verano el desempleo creció en 1.650 y 1.000 parados más respectivamente. A ello se suma el dato de la encuesta de población Activa (EPA) conocido hoy y que sitúa a la economía vasca como la que peor comportamiento ha tenido, junto a la de Murcia, en la generación de empleo.

El País Vasco además es una de las dos únicas comunidades autónomas que han visto incrementado su número de parados, 4.600 parados más, frente al resto de regiones, -excepto Murcia-, que han visto cómo se reduce su desempleo. Actualmente en Euskadi el número de parados es, según la EPA, de 133.000 personas y una tasa de desempleo del 12,8%.

La merma de la economía vasca también se ha dejado sentir en la recaudación de tributos que recientemente evaluaron las haciendas vascas. Así, frente a la previsión de recaudación hecha hace un año y que preveía ingresar un 7% más al incluir los tributos concertados, finalmente la evolución ha sido muy diferente, con un repunte de ingresos tributarios del 3,3%. Unas previsiones que han forzado a plantear una previsión para 2017 muy conservadora que iguala el repunte con el que se ha cerrado este ejercicio.

La caída de la recaudación obligará a los 251 ayuntamientos vascos, cuya financiación depende de las haciendas forales así como a las tres diputaciones, a reajustar sus partidas presupuestarias para adaptarlas al descenso de ingresos que en términos absolutos se ha producido al cierre de 2016 y que ha sido de 473 millones de euros menos de lo previsto.