Las participadas vuelven a dar un disgusto a La Caixa. La entidad ha visto en los últimos meses cómo sus perspectivas de ingresos a través de los dividendos de sus participadas han sufrido un cuantioso tajo en los últimos meses. Telefónica y Repsol, compañías presentes en la cartera de participadas de CaixaBank, han anunciado recientemente sendos recortes de dividendos. Y la reducción de la participación de Criteria Caixa en Gas Natural, tras la venta de un 10% del capital de la compañía el pasado septiembre, también ha representado la pérdida de parte de los ingresos generados por esta vía.

De este modo, los dividendos que el grupo financiero ingresará a través de los dividendos con cargo a 2016 de Telefónica, Repsol y Gas Natural está previsto que se sitúe en los 481,22 millones de euros, un 30% menos de los alrededor de 697 millones que adquirió el año anterior por este mismo concepto.

El último contratiempo en este apartado ha vendido de la mano de Repsol, en la que CaixaBank cuenta con una participación del 10,2%. La petrolera ha anunciado esta misma semana la reducción de su dividendo a cuenta de los resultados de 2016 a 0,35 euros, un 30% menos de lo abonado a sus accionistas el año anterior. La compañía aún no ha cuantificado cuanto prevé que ascienda el pago complementario que ejecutará a mediados de 2017, pero desde fuentes cercanas a la compañía aseguran que, la intención sería pagar una cantidad idéntica.

La Caixa ingresará 481 millones en dividendos de estas compañías con cargo a 2016, un 30% menos que el año anterior

Así, la petrolera pagaría con cargo a 2016 un dividendo total de 0,7 euros por acción, frente a los 0,8 euros del ejercicio anterior. De confirmarse este recorte, los ingresos de CaixaBank por el dividendo de Repsol a cuenta de 2016 se reducirán a alrededor de 104,74 millones de euros. Esta cifra contrasta con los alrededor de 170 millones que cobró la entidad por esta vía el año anterior, cuando su participación en Repsol superaba el 12%.

La entidad que preside Jordi Gual ha visto menguar su participación en la petrolera, principalmente, por la entrega de más de 29 millones de acciones, representativas del 2,06% del capital de Repsol, para la amortización de un bono canjeable en acciones, y por el efecto dilutivo del scrip dividend (el pago del dividendo en acciones), según explicó en el informe de resultados del primer semestre de 2016.

El recorte de Telefónica

Este contratiempo llega apenas un mes después de que Telefónica comunicara un recorte de sus pagos, ante la necesidad de sanear su balance y de reducir deuda para proteger su ráting, tras truncarse sus planes de sacar a bolsa su filial de infraestructuras Telxius.

CaixaBank cuenta con una participación de un 5% en la operadora, por el que ingresó unos 186,5 millones de euros en 2015, cuando la compañía que preside José María Álvarez-Pallete remuneró a sus accionistas con 0,75 euros por título. Para 2016, Telefónica ha reducido su dividendo a 0,55 euros, lo que implicará un descenso superior a 50 millones del dividendo que ingresará el banco. Además, el recorte irá a más en 2017, cuando Telefónica pase a abonar a sus accionistas 0,4 euros por dividendo.

Más significativo será el descenso de la remuneración que La Caixa recibe de Gas Natural. Y en este caso no por un recorte de los pagos de la firma gasista, sino por el descenso en la participación que la entidad mantiene en la compañía a través de su hólding Criteria.

El principal accionista de CaixaBank optó, junto a Repsol por hacer caja el pasado septiembre con la venta parcial de sus participaciones en Gas Natural Fenosa. Ambos grupos se desprendieron de sendos paquetes del 10% para su venta al fondo Global Infraestructures Partners (GIP). El nuevo socio de la eléctrica desembolsó 3.802 millones de euros (a razón de 1.901 millones para cada socio vendedor). Tras la operación Criteria controla un 24,4% y Repsol, un 20%.

La venta de un 10% de Gas Natural le supondrá a Criteria la pérdida de unos 100 millones anuales en dividendos

De este modo, está previsto que los dividendos de 341,7 millones que la gasista abonó a Criteria en 2015 se reduzcan en más de 100 millones de euros en 2016, a pesar de que el pago se mantendrá en 0,99 euros, según estimaciones de FactSet.

A pesar de estos reveses, la matriz del banco contará aún con un monto elevado de dividendos en 2016. Y no sólo de estas tres compañías. Sus participaciones en Abertis (18,9%) y Cellnex (4,7%) también supondrán una nada desdeñable fuente de ingresos.

En un momento donde el sector financiero padece elevadas dificultades para generar ingresos a través del negocio tradicional bancario, la generación de beneficios a través de vías externas, como los dividendos de las participadas, representan un alivio notable para CaixaBank. El grupo ingresó en los primeros nueve meses de 2016 algo más de 1.374, un 19,9% respecto al mismo periodo del año anterior.