El Gobierno de Murcia quiere poner en marcha cuanto antes su nuevo aeropuerto (el de Corvera) y se dispone a iniciar el concurso público para encontrar un nuevo concesionario privado que se encargue de la gestión de las instalaciones. Y lo hace sin esperar a cerrar un acuerdo con Aena para poner fin a los vuelos comerciales en el aeropuerto murciano hoy activo (el de San Javier), lo que pone en duda la rentabilidad del nuevo proyecto.

La historia del aeropuerto de Corvera, impulsado por el Gobierno de Murcia fuera de la red de Aena, es (demasiado) larga. El proyecto fue alumbrado en 2001 en pleno boom de la construcción y las obras de construcción concluyeron en 2012, tras unas inversiones de unos 270 millones de euros avaladas en gran parte por el Ejecutivo regional. El aeropuerto inicialmente iba a estar gestionado por un consorcio privado liderado por Sacyr, pero el contrato acabó roto y ambas partes aún se enfrentan con esa concesión en el Tribunal Supremo.

El Gobierno murciano, cuya estabilidad zozobra por la presunta implicación del presidente Pedro Antonio Sánchez en un caso de corrupción y tras romperse el acuerdo entre PP y Ciudadanos, ahora pretende acelerar la puesta en marcha del aeropuerto de Corvera. El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy iniciar la licitación del contrato de gestión del denominado Aeropuerto Internacional de la Región de Murcia durante los próximos 25 años.

Abrir Corvera cerrando San Javier

El Gobierno de Murcia y el Ministerio de Fomento coinciden en que el escenario ideal para hacer viable el nuevo aeropuerto es que su apertura coincida en el tiempo con el fin de los vuelos comerciales en el aeropuerto de San Javier, gestionado por Aena y que se destinará sólo a vuelos militares.

Sin embargo, el acuerdo con Aena para promover el cierre de San Javier no llega por las diferentes posiciones sobre la compensación que recibirá el gestor aeroportuario. Aena reclama recuperar al menos parte de las inversiones realizadas para ampliar el aeropuerto y recibir la compensación en un solo pago, no a plazos. Las inversiones sumaron unos 70 millones de euros.  Algo más de la mitad del importe lo aportó la propia Aena, y parte del montante restante procedió de fondos europeos.

Además, Aena estaría reclamando que el convenio con el Gobierno de Murcia contemple vías para hacer posible el mantenimiento del casi centenar de empleos ligados al aeropuerto de San Javier. En cualquier caso, no hay acuerdo y, aún así, el Ejecutivo regional se lanza a buscar empresas interesadas en hacerse cargo del aeropuerto de Corvera, aún teniendo la competencia directa de San Javier.

"El objetivo es no retrasar ni un día más la licitación del Aeropuerto Internacional, una infraestructura que es clave para el desarrollo de la Región, que está completamente terminada y preparada para operar de forma inmediata y que aportará múltiples beneficios", ha dicho en rueda de prensa el consejero murciano de Fomento e Infraestructuras, Pedro Rivera.

Las previsiones que maneja el Gobierno murciano para el futuro aeropuerto son optimistas. Quizá demasiado. El objetivo de la Administración regional pasa por que Corvera capte los 1,1 millones de pasajeros anuales con que hoy cuente San Javier –una vez deje de ofrecer vuelos comerciales- y un tercio de los 11 millones de viajeros de Alicante que, según sus cálculos, tienen origen o destino final en la Región de Murcia.