Nunca dejes que el futuro te inquiete. Te enfrentarás a él, si tienes que hacerlo, con las mismas armas de la razón que te equipan hoy contra el presente (Marco Aurelio). Así arranca la memoria de Popular de 2007, ejercicio en el que la entidad marcó su máximo histórico en bolsa. El 17 de abril de 2007, hace ahora 10 años, Popular capitalizaba 19.483 millones de euros. Hoy, apenas supera los 2.500 millones.

La débil evolución del negocio de Popular en la última década ha tenido un elocuente correlato en bolsa. La entidad se ha erigido en uno de los valores más golpeados por la crisis bancaria: sus títulos valen hoy cerca de un 98% menos que en abril de 2007.

El que fue el tercer mayor banco por capitalización y el octavo mayor valor de la bolsa española, se sitúa ahora mismo como el banco más pequeño del Ibex (de siete) y ni siquiera se cuenta entre las cuarenta mayores empresas del parqué español.

Popular ha perdido en 10 años 17.000 millones de capitalización más 5.500 millones de las ampliaciones

Entre medias, Popular ha visto esfumarse casi 17.000 millones de euros de capitalización, a los que habría que sumar los alrededor de 5.500 millones de euros que ha captado a través de tres procesos de ampliación de capital en los últimos años.

El descuento acumulado a lo largo de este periodo no ha sido suficiente para que el banco recupere cierto atractivo a ojos de los inversores. Al contrario, tras restar en 2016 más de dos tercios de su valor, el banco ha vuelto a situarse en el primer tramo del presente ejercicio como el peor valor del Ibex, al acumular recortes superiores al 30%.

Además, los inversores siguen viendo razones para apostar a que el rumbo bursátil de Popular seguirá apuntando a la baja, como demuestra el hecho de que las apuestas bajistas sobre el valor -aquellas en los que los inversores ganan si las acciones caen el bolsa- alcanzaron el pasado viernes el 12,19% del capital, la cifra más elevada de su historia.

En 2007 Popular ganó más de 1.200 millones; en 2016 perdió 3.500 millones

Los buenos tiempos que vivió Popular en el parqué hace 10 años tenían los días contados, al compás del deterioro de la actividad bancaria, golpeada por la crisis inmobiliaria. Pero entonces, el banco aún iba como un tiro. Presumía de haber "recogido los frutos de la estrategia prudente que ha seguido en los dos últimos años de fortalecimiento de sus fuentes de financiación; la menor dependencia del sector inmobiliario; mayor selectividad en la asunción de riesgo crediticio".

En la memoria del banco de 2007, Popular pone el acento en los buenos resultados -ése ejercicio 1.260 millones, un 22,8% más que en 2006- y destaca "un crecimiento récord del margen de intermediación, cercano al 15,9% en el cuarto trimestre. En términos acumulados, el crecimiento anual es del 13,1%". Cerró 2007 con un margen de de 3.430 millones. En 2016, ésta ratio cayó un 6,9%, hasta 2.090 millones.

Del más al menos rentable

En los albores de la mayor crisis económica desde la Gran Depresión, el banco destacaba por gestionar con el foco en la búsqueda de la rentabilidad maximizando el ROE (retorno sobre el capital), que se había situado entre el 20 y el 30% en los últimos 20 años. Hoy, su ROE es negativo (-4,6%), dadas las pérdidas de más de 3.500 millones registradas en 2016.  Los números rojos contrastan con los 1.260 millones que ganó en 2007. Este beneficio suponía una rentabilidad del 23,95% sobre los recursos propios medios (ROE).

Hace 10 años, Popular destacaba que "el reforzamiento permanente de la solidez del balance y de la solvencia" se reflejaba en que "sólo cuatro bancos en Europa tuviesen un ráting más elevado que el de Popular". En 2007 tenía grado de inversión: Aa1, de Moody's, y AA, de Standard & Poor's y Fitch. Hoy es bono basura, siendo el banco español con peor nota en su calidad crediticia.

Además de "la mejora sistemática de la eficiencia, que da lugar a que el grupo tenga la mejor ratio de eficiencia del sistema bancario español y una de las mejores del conjunto de bancos europeos. De esta forma, a diciembre de 2007 la eficiencia operativa (mejor cuanto más baja) se situó en el 30,69%". Hoy es del 66,7%.

Ha pasado de tener uno de los mejores ráting crediticios de la banca europea a ser bono basura

La ratio de morosidad se ha disparado en la última década, dado el estallido de la burbuja inmobiliaria, desde el 0,8% hasta el 14,6%, por encima de la media del sector.

Actualmente, Popular cuenta con 35.675 millones de euros de activos tóxicos (créditos dudosos e inmuebles), que suponen el 28% de su balance. La entidad necesita elevar su capital para hacer frente a las exigencias de los reguladores y ha abierto procesos para vender activos no estratégicos, al tiempo que se plantea una nueva ampliación de capital. La puerta está abierta a una operación corporativa. De hecho, el Gobierno espera que, en breve, se materialice una oferta de compra por Popular.