El sector turístico no quiere dar por perdido el verano. Pero, de momento, las grandes empresas españolas del ramo se quejan de que no saben a qué atenerse, de que ignoran cuánto durarán las restricciones de movilidad y si tendrán turistas españoles o extranjeros, o de ningún tipo, que atender este verano.

Y las compañías temen, además, que mientras otros países como Portugal, Grecia, Italia o Francia empiezan a tomar medidas para reactivar el turismo, España se esté quedando definitivamente rezagada y esté lanzando a los turistas potenciales justo el mensaje contrario después de activar hace una semana las cuarentenas de 14 días a todos los viajeros procedentes del extranjero, con confinamientos forzosos en el domicilio o en el hotel durante esas dos semanas.

En apenas una semana, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha apuntado que el turismo nacional y el extranjero se reactivarían a la vez y que sería a finales de junio; la vicepresidenta Teresa Ribera ha indicado, en cambio, que se trabaja con la idea de reabrir la movilidad en julio; el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha apuntado que las cuarentenas se mantendrán “el tiempo que sea necesario, probablemente toda la desescalada"...

“Que se pongan de acuerdo. El sector necesita certezas, no deseos o suposiciones. Necesitamos que el Gobierno dé ya una fecha concreta de cuándo empezamos, aunque sea con todas las cautelas y advirtiendo de que podría cambiar por razones sólo sanitarias”, sentencia José Luis Zoreda, vicepresidente de Exceltur, un lobby que agrupa a una treintena de las mayores empresas turísticas de España, entre ellas Meliá, NH Hotel Group, Iberia, Globalia, Riu o Renfe. “Que decidan una fecha, y que sea el presidente del Gobierno el que salga a comunicar solemnemente cuándo podrá haber turismo. Que lance el mensaje claro de que los turistas serán bienvenidos”.

Desde las grandes empresas turísticas se alerta de que necesitan saber cuándo y saberlo con tiempo suficiente, porque los touroperadores y las aerolíneas requieren al menos un mes para organizar la operativa para lanzar vuelos, porque los hoteles han de comercializar con tiempo y saber a quién dirigirse…

"No sabemos qué va a pasar. Cada día que pasa vemos cómo se producen cancelaciones. Y también se están haciendo reservas para el verano, pero con la duda de si realmente se van a convertir en noches de hotel", alerta Jorge Marichal, presidente de la patronal hotelera Cehat.

Tanto Exceltur como la Mesa del Turismo, otro lobby integrado por empresarios y profesionales del sector, señalan como ideal la fecha del 15 de junio para reabrir la movilidad al menos entre algunas regiones y al menos con algunos países europeos en determinados destinos. “La Mesa del Turismo hace un llamamiento al Gobierno (…) para reiniciar la actividad turística cuanto antes, ya que perder la temporada de verano sería una completa calamidad. Nos marcamos una fecha clave: el 15 de junio. No más tarde”, sostiene Joan Molas, presidente de la Mesa del Turismo.

Según las estimaciones de esta asociación, las pérdidas acumuladas por el turismo nacional hasta finales de mayo alcanzarán los 40.000 millones de euros. La cifra se doblará, superando los 80.000 millones de euros a la altura del mes de agosto “si no se reactiva el turismo de forma inmediata”. Y podría situarse por encima de los 120.000 millones de euros a finales de año de no recuperarse la actividad totalmente.

“A mediados de junio el sector turístico español debe tener la posibilidad de activarse, dando las máximas posibilidades a sus ciudadanos para retomar los viajes y a todos los turistas extranjeros de disfrutar nuevamente de sus vacaciones en España (…) Y con todas las garantías sanitarias que estamos en perfectas condiciones de ofrecer, debemos volver a la actividad sin más dilación”, explica Molas.

Desde la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) se advierte de que sólo algunos destinos españoles de interior pueden salvar el verano sólo el turista nacional, "pero en zonas de sol y playa, en la islas, el turismo nacional no puede suplir el volumen de turistas internacionales que tenemos cada año", dice Marichal.

Y es que las asociaciones turísticas muestran también su preocupación por la aparente pretensión del Gobierno de condicionar la vuelta de los turistas extranjeros a que toda España haya avanzado tanto en la desescalada como para que todos los nacionales puedan moverse entre provincias.

“Esto no va de hacer una especie de patriotismo equívoco. Esto no va de la nacionalidad de los viajeros. Los viajes deben estar permitidos entre provincias con situaciones epidemiológicas seguras y con países de origen también seguros”, apunta Zoreda, de Exceltur. “No tiene sentido que no puedan venir turistas extranjeros si hay dos comunidades autónomas que no avanzan en las fases de desescalada. Viajar desde zonas seguras a destinos seguros, sea cual sea la nacionalidad del viajero”.