Albert Rivera ya había abandonado la sede de Ciudadanos cuando Feijóo en Galicia y Urkullu en País Vasco salieron a celebrar sus respectivas victorias. A la formación, el naranja se le hizo  amargo después de lo que puede considerarse un rotundo fracaso electoral, al no haber obtenido escaño en ninguna de las cámaras autonómicas. A la falta de representación se suma la pérdida de casi 100.000 votos en Galicia respecto a las elecciones de diciembre de 2015, perdiendo una tercera parte de la representación que consiguió en su primera cita electoral como partido nacional.

Si entonces consiguió casi 148.000 papeletas y el 9% en Galicia, ahora su apoyo se reduce a los 47.698 votos y el 3,37% (con el 99,25% del escrutinio). La caída de Ciudadanos también es patente en el País Vasco, donde consigue sólo la mitad de los resultados de diciembre: el 2,02% del voto y 21.362 papeletas a su favor frente a las casi 50.000 y el 4% del 20-D. Así, la formación de Albert Rivera se enfrenta a sus peores resultados en ambas comunidades desde que comenzara su andadura nacional.

Euskadi, donde esperaban rascar un diputado por Álava y donde pensaban atraer al electorado que en su día ganó UPyD, ha sido la gran decepción. Con un 3,5% de los votos en este provincia hubiera bastado para lograrlo, pero lograron sólo un 3,17% y 4.754 votos; unos resultados que empeoran los del partido de Rosa Díez en Álava en 2012, donde obtuvo un 3,52% y 5.435 papeletas.

El vicesecretario general de C’s, José Manuel Villegas, fue el dirigente que compareció para dar explicaciones. Con gesto fúnebre, felicitó en primer lugar a PNV y PP y bajó la cabeza para asumir la derrota: “En cuanto a resultados, está claro que no hemos cumplido ni alcanzado el objetivo que habíamos planteado”, resumió. Después de valorar los logros de la formación –tener representación europea y haber entrado en doce parlamentos autonómicos-, Villegas volvió a la autocrítica: “Deberíamos haber rematado este año de éxitos en los parlamentos de Galicia y País Vasco”, ha lamentado.

Sin embargo, el vicesecretario ha mostrado la cercanía de su objetivo. “Nos hemos quedado a 500 votos en la provincia de Álava”, ha señalado. En Galicia se ha referido a la “exigente” Ley electoral, por la que se necesita un 5% de votos para obtener representación. “Hemos estado a un punto a entrar en Pontevedra pero no hemos podido superar ese 5% de esa exigente Ley electoral gallega y nos hemos quedado fuera”, se justificó Villegas.

El secretario de organización de Ciudadanos, Fernando del Páramo, en declaraciones a La Sexta, ha incidido en la autocrítica y ha resaltado que “hay que dar la cara en los momentos buenos y en los no tan buenos”. “Estábamos en el filo de la navaja entre entrar y no entrar”, ha explicado, para augurar que van a “seguir intentándolo y trabajando para obtener mejores resultados en ambas comunidades autónomas”.