Aún sigue coleando el tema de elevar el copago farmaceútico para cerca de dos millones de pensionistas ante un PP y Gobierno que califican el anuncio de "patinazo" y aseguran que "el asunto no está sobre la mesa". Las palabras de la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, y sus posteriores matizaciones no han dejado de provocar incomodidad entre los populares y otros miembros del Ejecutivo que como el titular de Economía, Luis de Guindos, han señalado que no hay nada de eso "en la agenda del Gobierno". La propia ministra explicó el lunes por la noche el alcance de sus palabras al vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez-Maíllo, con quien coincidió en la cena monclovita adelantada por El Independiente.

De hecho, pocos minutos antes de unirse a esa cita como miembro del comité negociador del pacto con Ciudadanos, la ministra catalana lanzó su primer tuit para intentar atemperar la polvareda levantada. "No es cierto que se vaya a subir el copago farmacéutico a los pensionistas con ingresos de más de 18.000€", escribió al filo de las 21.30. De esa manera evitaba acaso que el socio preferente del Gobierno de Mariano Rajoy, Albert Rivera, se interesara en la cena por una cuestión sobre la que su partido ya se había manifestado en contra.

Las fuentes consultadas por este medio aseguran que la matización de la ministra "fue producto de una reflexión personal al pasar de las horas", aunque es evidente que le debieron llegar las muestras de malestar de algunos compañeros de partido, con y sin ministerio a cargo.

En mitad del periodo congresual, con una dirección nacional intentando poner sordina a los debates internos -como el provocado por el PP de Madrid reclamando primarias-, el tema de revisar al alza el copago para las pensiones más altas les ha pillado con el pie cambiado. La ponencia social, que coordina Javier Maroto, no dice nada sobre ello, ni visos de incorporar tan espinoso asunto. PSOE, Ciudadanos y Podemos han avisado que, de llevarlo a la Cámara, no lo respaldarán, por lo que el Ministerio de Dolors Montserrat, intenta matizar sus palabras del martes a la cadena Ràdio4.

Un documento del Ministerio de Sanidad dice que no habrá modificación del actual sistema

Consciente de la repercusión de sus afirmaciones, la ministra quiso tranquilizar ayer a los dos millones de jubilados que ingresan más de 18.000 euros y a los que, supuestamente, les afectaría esta medida de salir adelante. "No alarmemos a los pensionistas, no se va a subir el copago", reiteró. En un documento de Sanidad, al que ha tenido acceso El Independiente, puede leerse que "no está prevista ninguna modificación del sistema actual del copago farmacéutico", aunque a continuación explica que, ante las preguntas que le formularon a Montserrat, manifestó "su disposición a estudiar en un futuro" la modificación del tramo de los pensionistas con rentas iguales o superiores a 18.000 € e inferiores a 100.000 €.

En el mismo texto señala Sanidad que el copago farmacéutico "no es un invento ni una imposición del PP", sino que este ya existía, pero la población activa abonaba el 40 por ciento del precio de la receta, ahora es del 60, y los pensionistas estaban exentos y ahora pagan entre un 10 por ciento y un 60 por ciento.

Escasa progresividad

Lo cierto es que el actual sistema carece de progresividad. Tanto los pensionistas de rentas más bajas como los que ingresan hasta 100.000 euros abonan el mismo 10 por ciento de la receta, hasta un máximo de 8 euros al mes los que llegan a 18.000 euros y de 18 euros hasta 100.000. Los que tienen la suerte de tener pensiones de lujo- sobre todo por planes privados o bonificaciones de empresas- y superan esos 100.000 euros, pagan un 60 por ciento del coste de la receta y un máximo de 60 euros al mes.

Sanidad se defiende argumentando que la reforma que abordó siendo ministra Ana Mato "impuso un sistema de copagos más progresivo, pensando en los más vulnerables, como son los parados de larga de duración y sus familias, que ahora están exentos del copago (más de un millón de personas)".

La controversia se produce una semana antes de la Conferencia de Presidentes, que debatirá sobre financiación

En todo caso, la polémica se ha producido en un momento bastante inconveniente para el PP y para el Gobierno, que reúne el martes de la semana que viene la Conferencia de Presidentes, donde se suscitarán cuestiones relativas a la financiación autonómica y el gasto sanitario. Hoy por la mañana habrá una segunda reunión preparatoria de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, con los consejeros de Presidencia de las Comunidades Autónomas.

La "número dos" del Gobierno ha puesto todo su empeño en que la cita sea un éxito a pesar de las anunciadas ausencias del presidente catalán, Carles Puirgdemont, y del lehendakari, Íñigo Urkullu, y de controversias que Moncloa ahora no desea.