Buena parte de la dirección de Génova ve con preocupación el debate sobre los vientres de alquiler o maternidad subrogada que, si no hay retirada de enmiendas, deberá abordarse en el XVIII Congreso popular. Un alto dirigente no duda en calificarlo de “inoportuno” por entender que todos los debates de índole moral, como éste, “nos enfrentan porque hay sectores muy diferenciados en el partido”.

Pasó con el aborto y con el matrimonio homosexual, ambos recurridos ante el Tribunal Constitucional por el PP. El alto tribunal sentenció a favor de las uniones entre personas del mismo sexo pero duerme el sueño de los justos con el aborto. Génova no se mueve con comodidad en aquellos asuntos que enfrentan al que algunos bautizan con el expresivo nombre de Concilio de Trento, por retrógrados, dicen, frente a un sector más renovador, más moderno, que defiende, en cambio, que el partido en el Gobierno debe abrir estos temas porque están presentes en la sociedad.

Ex parlamentarios como Luis Peral, Eugenio Nasarre o Lourdes Méndez encabezan el ala conservadora

Del Concilio son un puñado de ex parlamentarios que votaron en 2015 contra la reforma parcial de la ley del aborto, que sólo tocó la parte referida al conocimiento y permiso paterno para las jóvenes de 16 y 17 años. Se trata de Luis Peral, que presenta una enmienda a la ponencia social que coordina Javier Maroto contra la actual ley del aborto, y de otros muchos que le secundan en su petición de voto en conciencia como Eva Durán, Beatriz Elorriaga, José María Alonso, Javier Puente, Regina Plañiol y Jorge Pumariega.

El ex parlamentario Luis Peral (d), junto a Ignacio Arsuaga, de la plataforma Hazte Oír.

El ex parlamentario Luis Peral (d), junto a Ignacio Arsuaga, de la plataforma Hazte Oír.

Peral dejó recientemente su escaño en la Comunidad de Madrid tras ausentarse de la votación en el Parlamento regional de la Ley contra la “LGTBfobia” y otra a favor de regular la maternidad subrogada o vientre de alquiler. De este sector es también el ex diputado y ex dirigente popular Eugenio Nasarre, curiosamente uno de los padres del giro al centro reformista que protagonizó José María Aznar en el PP de los años 90. El listado incluye además a José Ignacio Azpiroz y Lourdes Méndez. Ésta última, ex portavoz de Asuntos Sociales del PP, pide prohibir la maternidad subrogada por entender que se trata de una “nueva forma de explotación” de la mujer.

Los modernos son Cifuentes, Feijóo, Aguirre y Maroto, y las direcciones de Valencia, Cataluña y Andalucía

Del lado de los modernos están la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, y su homólogo gallego, Alberto Núñez Feijóo, pero también Esperanza Aguirre, además del ponente del texto social, el vicesecretario de Acción Sectorial, Javier Maroto, que han defendido la regulación de los vientres de alquiler. Maroto no ha incluido la maternidad subrogada en la ponencia y Cifuentes, que pensaba presentar una enmienda en este sentido, se arrepintió finalmente “para no tocar más las narices”, según fuentes del PP regional, aunque sí lo han hecho Valencia, Cataluña y Andalucía.

En el interregno hay una serie de dirigentes populares que tienen la peor de las impresiones respecto a este debate, porque divide y hasta puede meter a la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, “en un atolladero” si salen adelante las enmiendas que apuestan por su regulación, afirman distintas fuentes consultadas.

Se teme que este debate pueda acabar metiendo a la ministra de Sanidad “en un atolladero”

Incluso estratégicamente les parece un error. El perfil bajo de esta cita, al que se le han ido limando asperezas como la que representaba la enmienda madrileña sobre primarias, hoy retirada, quería venderse de cara a la opinión pública como una suerte de “estabilidad” política.

Mientras en Vistalegre II los principales dirigentes de Podemos no han hecho más que poner énfasis en lo que les separa, y el PSOE, que ese mismo fin de semana del 11-12 de febrero celebra en Madrid una cita de alcaldes socialistas con Susana Díaz, se ve abocado a unas inciertas primarias, “nosotros nos vamos a liar con un debate incómodo en lugar de transmitir una idea de estabilidad, de certezas, de tranquilidad”.

Otros, en cambio, recuerdan que la renuncia del gobierno de Aznar a regular las parejas de hecho hizo que el presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero sacase adelante la reforma del Registro Civil para reconocer el matrimonio homosexual, lo que llevó al PP a una respuesta errática que, con los años, ha tenido que corregir.

Rajoy pidió que en los Congresos regionales no hubiera “ni ruido ni líos” y quiere lo mismo para el suyo

El objetivo de Génova es que en la jornada del sábado 11 el interés informativo se centre en el discurso de presentación de candidatura de Mariano Rajoy, donde revelará la composición de su Comité Nacional y, por tanto, el nombre de su número dos, con todas las papeletas a favor de María Dolores de Cospedal. Poco más.

Un cónclave de trámite sin grandes sorpresas o, al menos, ésa era la consigna del propio Rajoy. Ni “líos ni ruido”, dijo en el último Comité Nacional de su partido a la hora de instruir sobre los Congresos regionales que se celebraran entre marzo y abril. Esa misma consigna era de aplicación para el XVIII Congreso, otra cosa es que lo consiga.