La presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, y los cuatro miembros de la Mesa que apoyaron la votación de una resolución en la que se fijaba el proceso de preparación del referéndum independentista, Lluís Corominas, Anna Simó, Ramona Barrufet, de JxS, y Joan Josep Nuet, de CSQP, han rechazado este jueves las advertencias del Tribunal Constitucional y han asegurado que seguirán "permitiendo el debate" sobre la hoja de ruta independentista. En una comparecencia conjunta tras hacerse pública la interlocutoria del Alto Tribunal en la que se estima el incidente de ejecución sobre la resolución 306/XI del Parlament, Forcadell ha asegurado que "pese a las intimidaciones, amenazas y requerimientos seguiremos defendiendo el debate en el Parlament".

La presidenta de la Cámara catalana ha acusado al Constitucional de pretender convertirlos en "censores" a las ordenes del Gobierno y ha asegurado que ninguno de ellos teme ser inhabilitado porque están convencidos de haber actuado dentro de la más estricta legalidad. Unas palabras que contrastan con el auto del TC, en el que se advierte "por tercera vez" a la Mesa del Parlament, y de manera unánime, que no se puede alegar la "legitimidad" en defensa del referéndum. "En una concepción democrática del poder no hay más legitimidad que la legalidad constitucional", sentencia el TC. "Sin conformidad con la Carta Magna no puede predicarse legitimidad alguna", añade.

El vicepresidente del Parlament, Lluís Corominas, ha acusado además al Constitucional de no defender la separación de poderes, al no defender "al legislativo de los ataques del ejecutivo" en referencia a la Cámara catalana y al Gobierno, respectivamente. Y ha criticado que el Constitucional pretenda que "sólo podamos hablar si lo hacemos dentro de los límites de la Constitución; es inadmisible" ha concluido.

El ecosocialista Nuet ha asegurado que, pese a no ser independentista, no acatará el mandato del Constitucional en defensa de la libertad de debate en el Parlament. "No es trabajo de la Mesa decidir de qué temas se puede hablar y de cuáles no", ha asegurado tras criticar que se hagan "listas negras de temas sobre los que se puede hablar".