Los principales dirigentes de Podemos no aceptan las amenazas a periodistas por parte de la formación denunciadas este lunes en un comunicado de Asociación de la Prensa de Madrid (APM). El secretario general de la formación, Pablo Iglesias, su portavoz en el Congreso, Irene Montero, y su secretario de Organización, Pablo Echenique, han negado la existencia de esas presiones y han instado a presentar las pruebas ante los tribunales.

La primera en hacerlo ha sido Irene Montero, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces en el Congreso: "Por supuesto que no es verdad", ha asegurado, apelando a la falta de "pruebas" aportadas por la asociación. Mientras, Echenique, en declaraciones a periodistas en Zaragoza, ha continuado esta línea y se ha referido a las "falsedades" del comunicado, ha asegurado que se trata de una "operación mediática" y ha asegurado que no se ha abierto ninguna investigación interna al no tener esas pruebas en su posesión.

Echenique atribuye las denuncias a una "operación mediática" contra la formación

En el parlamento, Montero ha reconocido su preocupación por el asunto, pero dicho estar "contenta de que se pueda abrir el debate respecto a la libertad de prensa. Y, por qué no, también con los propietarios de los medios", ha asegurado, ampliando el foco a la situación de la profesión periodística y la "precariedad laboral", recordando también que "en el mundo 93 periodistas han sido asesinados". "Según la APM en un 75% de los casos los periodistas tienen que autocorregirse o ceder a presiones de sus propios jefes y esto tiene que ver con la precariedad laboral", ha señalado la diputada, haciendo referencia a un informe de la asociación denunciante.

Una asociación a la que, en cambio, no reconocen la legitimidad de la denuncia, apelando a la falta de pruebas aportadas, que no se han hecho públicas para resguardar la identidad de los implicados. "Son una serie de acusaciones muy graves en las que no se han aportado pruebas"; ha advertido la portavoz que, a preguntas, ha respondido que "por supuesto que no me parecería bien" y añadiendo que "por supuesto que no es verdad". "Sé que no ha ocurrido", ha llegado a insistir, en una afirmación que ha matizado poco después: "Creo que eso no ha ocurrido".

Irene Montero ha denunciado que el "foco" está más puesto sobre Podemos que en el resto de formaciones y ha instado a los implicados a pronunciarse sobre las presiones sufridas: "Entiendo que los periodistas estarán dispuestos a explicar qué es lo que ha ocurrido", ha señalado. En su caso, ha asegurado que han "pedido perdón en otras ocasiones".

Echenique, después de una rueda de prensa en Zaragoza, al ser preguntado sobre el asunto ha comenzado afirmando que "más allá de las falsedades que se dicen en ese comunicado hay que darle las bienvenida a un debate sobre las presiones a periodistas en los medios de comunicación", ha señalado, antes de volver a citar el informe de la APM.

En este sentido ha citado los que, en su opinión, son el origen de estas presiones. "Lo que es inédito y sorprendente es que Podemos no esté en ninguno de esos tres grupos, ni dueño de medios, ni poder económico ni Gobierno y que sorprendentemente la APM diga esto de nosotros, que aprovecho para desmentir y decir que no es verdad".

Quien habla de amenazas habla de delitos y tendría que ponerlo en manos de un tribunal", dice Iglesias

Sobre la apertura de una investigación interna para dilucidar los hechos, Echenique ha negado el procedimiento alegando la falta de pruebas. "Asistimos atónitas a lo que parece una operación mediática", ha deslizado el dirigente. "Me alegro mucho de que [la documentación] la tenga la APM pero no la tenemos, con lo cual no podemos investigar nada al respecto", ha zanjado el secretario de Organización.

A su llegada al Pleno, Pablo Iglesias ha esgrimido el mismo argumento y ha invitado a acudir a los tribunales. Después de apartar el foco de la cuestión y citar de nuevo el informe de la APM, ha sido preguntado directamente: "¿Puede decir que no son verdad esas amenazas?", a lo que Iglesias ha respondido de forma contundente: "Claro que sí, y quien habla de amenazas habla de delitos y tendría que poner las amenazas en manos de un tribunal". "Los jueces tendrían que intervenir y si no estaríamos en una situación muy extraña en la que alguien hace acusaciones sin pruebas".