Francisco Correa se ha negado a declarar este jueves ante el juez José de la Mata en la investigación sobre la caja b del PP, pero se ha ofrecido a colaborar con la justicia en las otras piezas "a la carta", según fuentes presentes en su declaración. El jefe de la trama Gürtel, en prisión por el caso Fitur desde el pasado mes de febrero, no ha ratificado la versión que ofreció en el juicio de esta red de corrupción en la que confesó que medió con empresarios en adjudicaciones públicas y que se repartía las comisiones con Luis Bárcenas.

El juez decidió reabrir esta causa tras estas declaraciones de Correa en la vista del caso Gürtel. En sus manifestaciones implicó al intermediario Plácido Vázquez que ha sido citado por el magistrado el viernes. Correa explicó en el juicio que había montado un chiringuito con el ex tesorero del PP para repartirse las comisiones que cobraba a empresarios para que obtuvieran adjudicaciones de ministerios como Fomento o Medio Ambiente.

Causa archivada

Sin embargo, en su comparecencia ante el juez se ha negado a declarar por lo que no ha ratificado esta versión. Fuentes de su entorno han explicado que el jefe de esta trama de corrupción no ha querido prestar declaración en esta pieza ante el convencimiento de que se va a archivar. En esta causa, que está ya señalada para juicio, se juzga los llamados papeles de Bárcenas y se sientan en el banquillo cinco personas, entre ellas el ex tesorero del PP por haber pagado en negro las obras de remodelación de la sede central del partido conservador.

En esta investigación estuvieron imputados varios constructores por un delito de cohecho. Sin embargo, la causa se archivó contra ellos porque un informe de la Intervención General del Estado determinó que no se podía afirmar que los donativos que efectuaron al partido y que aparecían en las anotaciones con Bárcenas fueran sobornos porque las obras que se les adjudicaron lo fueron por la capacidad de estas empresas para llevarlas a cabo.

Traslado desde prisión en condiciones especiales

Entre los constructores que fueron investigados figuraba Alfonso García Pozuelo que en esta causa se negó a declarar. Sin embargo, en la vista del juicio Gürtel admitió que había pagado comisiones a cambio de adjudicaciones públicas. En la mañana de este jueves, este empresario tampoco ha querido declarar ante el juez De la Mata.

La estancia de Correa en el despacho del juez ha durado poco más de media hora. Correa se ha limitado a decir que mantenía su intención de colaborar con la justicia en las otras piezas que aún están pendientes de instrucción. El juez le ha preguntado si su colaboración era "a la carta" y el jefe de la trama de corrupción le ha respondido afirmativamente.

El magistrado había ordenado que el traslado de Correa desde la cárcel donde está ingresado se realizara en unas condiciones especiales por la claustrofobia que padece el jefe de la red corrupta. Por ello, debía ser conducido en un vehículo con ventanas y espacioso.

Correa está intentado alcanzar un acuerdo con la fiscalía anticorrupción para cerrar todos sus procesos abiertos y lograr una reducción de su estancia en prisión. De momento, ya ha entregado a la justicia cinco millones de euros que la acusación pública le reclama en concepto de responsabilidad civil.