Diez minutos ha durado la reunión de la ponencia conjunta más reducida de la historia del Parlament. Es el tiempo que han tardado los dos representantes de JxS en la ponencia, Jordi Turull y Roger Torrent, y la portavoz de la CUP Anna Gabriel, en dar el sí al proyecto de reforma del reglamento del Parlament que los independentistas ya habían preparado anteriormente, y que permitirá la aprobación "exprés" del referéndum de independencia. Ahora el texto debe ser votado en el Pleno como proposición de ley, donde previsiblemente volverá a imponerse la mayoría independentista.

La ponencia se constituyó la semana pasada pese a la oposición de los cuatro grupos de la oposición en la Cámara autonómica, C's, PSC, CSQP y PP, que ayer todavía debatían la posibilidad de presentar ante el Tribunal Constitucional un recurso de amparo por la constitución de una ponencia conjunta en la que sólo han participado el grupo que da apoyo al Gobierno y sus aliados parlamentarios de la CUP.

El texto aprobado reforma el reglamento para permitir la aprobación por vía de lectura única de una proposición de ley. Una reforma que los independentistas usarán previsiblemente el próximo septiembre para aprobar la ley de convocatoria del referéndum independentista sin debate parlamentario, e introduciéndola previsiblemente en el orden del día del pleno escogido por la vía de urgencia, de forma que impedirán cualquier recurso previo de la oposición al Consejo de Garantías Estatutarias o al Tribunal Constitucional.

Tramitación de urgencia

El ex convergente Jordi Turull ha explicado que han hecho "la primera y última reunión de la ponencia conjunta para que, tal y como establece el reglamento, modificar este mismo texto, y lo que haremos ahora es registrar el informe y trasladarlo a la reunión de la Mesa del próximo martes". Tras el trámite, JxS y la CUP han solicitado tramitar por el procedimiento de urgencia la reforma para abreviar los plazos de presentación de posibles enmiendas a la totalidad, que de 30 días pasa a 5 a partir de la publicación del texto.

Los proponentes piden reducir de 30 a 5 días el plazo de presentación de enmiendas para aprobar la ley definitivamente antes de verano

"Entendemos que hay tiempo suficiente", ha recalcado Turull  y, una vez superado el debate a la totalidad, "la propuesta será tramitada entonces con toda normalidad, como cualquier proposición de ley: Todos los grupos podrán presentar sus enmiendas, que pueden ser al texto base, pero también a todo el contenido del reglamento" ha argumentado para defender una reforma que se ha impuesto en contra de la mitad de la Cámara. El objetivo es quemar etapas, es decir, incluir el debate a la totalidad en el orden del día del próximo pleno, fijado para el 5 y 6 de abril y aprobar el texto definitivo antes de verano.