Al mismo tiempo que Susana Díaz presentaba oficialmente en Madrid su candidatura a las primarias del PSOE arropada por las grandes figuras del partido -Felipe González, Alfonso Guerra, José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba- Pedro Sánchez defendía el poder de la militancia en Burjassot (Valencia) rodeado de cuatro mil afiliados bajo el lema "Sí es Sí".

El que fuera secretario general del partido ha reivindicado los derechos de los militantes para resolver la crisis de liderazgo del partido mandando un recado a la presidenta de la Junta: "El cambio del PSOE vendrá de abajo y no de arriba". Ésta no ha sido su única referencia a la candidatura de Díaz, en cuya intervención no han faltado las alusiones a los anteriores gobiernos socialistas.

El futuro no va a ser liderado por quien se aferra al pasado", ha avisado Sánchez

Sánchez, por su parte, quiere que el partido mire hacia el futuro y deja atrás el pasado: "El futuro no va a ser liderado por quien se aferra al pasado, por muy orgullosos que estemos de ese pasado. El PSOE ya conquistó el pasado pero hay que conquistar el futuro". Para ello, el candidato a las primarias ha asumido cinco compromisos: una dirección de izquierdas; situarse frente a Rajoy y no a su lado; recuperar la credibilidad; unir el partido y volver a ser "la fuerza del cambio".

Sánchez ha reprochado a la gestora socialista que haya dejado pasar nueve meses para solucionar la crisis de liderazgo, algo que, a su juicio, sólo beneficia al PP. Ahora, ha señalado, el partido se encuentra en una encrucijada de la que sólo hay dos opciones, más allá del número de candidatos: "Un PSOE del siglo XX o del siglo XXI; el PSOE de la abstención a Rajoy o el PSOE que quiere la militancia, que es un PSOE de izquierdas".

Besos, abrazos e incluso ramos de rosas han sido los elementos que han marcado este encuentro con el que el ex secretario general ha contraprogramado la candidatura de Susana Díaz. Presumiendo de haber caído "cumpliendo la palabra dada", el también candidato a liderar el PSOE no ha cambiado su postura y ha avanzado lo que pasará el día después de la celebración de las primarias si resulta ganador: "Sí a la unidad del PSOE y no a los presupuestos de Rajoy".

Esta unidad es la que debe definir al nuevo PSOE, según el ex secretario general, así como la lealtad, "la única palabra que va a salir de mi boca después de estas primarias". El único adversario, ha recalcado, es el PP.

Patxi López pide lealtad "sin revanchas"

El mismo mensaje de unidad y lealtad ha sido compartido por el ex lehendakari y candidato a las primarias Patxi López, quien también se ha reunido este domingo con militantes en Torrelavega (Cantabria). En él, López ha insistido en la necesidad de recuperar la fuerza del partido y que vuelva a marcar "el ritmo de este país", para lo que quiere dejar a un lado las disputas internas que tanto les ha costado en las urnas. "Si seguimos enfrentándonos entre socialistas ¿cómo nos vamos a enfrentar a la derecha? ¿cómo nos enfrentamos a los problemas que tiene la ciudadanía? Si seguimos gritándonos entre nosotros ¿quién nos va a escuchar?", ha señalado.

Patxi López ha pedido unidad, lealtad y un debate entre los candidatos

El discurso de López y el de Sánchez han tenido muchos elementos en común. Además de la unidad, el ex lehendakari también ha remarcado que los adversarios "no están dentro del PSOE, están fuera y se frotan las manos cada vez que nos ven pelear entre nosotros". Por eso, ha restado importancia al hecho de quién y cómo gane las primarias para pensar en el proyecto común y respetar a quien sea nombrado secretario general sin "cobrar revanchas" ni apartar a nadie "porque no se trata sólo de ser leal al que gane, sino de ser capaces de integrar al que pierda".

López ha visitado a los militantes de Torrelavega para explicarles el proyecto de su candidatura, un proyecto "pegado a los problemas de la gente". Tras las primarias, el PSOE debe convertirse en un partido autónomo "que no sea ni sostén del PP, ni acompañante de un Podemos que no tiene más ambición que superarnos", ha indicado.

Además, ha pedido directamente a la gestora que organice un debate entre los tres candidatos para contrastar las propuestas de cada uno y que éstos sean abiertos a la militancia. "Elevemos el nivel de estas primarias. Hagamos que nuestros militantes se vuelvan a sentir orgullosos de su Partido". Episodios como el del comité federal del 1 de octubre en el que Sánchez presentó su dimisión no deben repetirse, según López, que invita a dejar a un lado las descalificaciones y llevar a cabo un debate serio. Al igual que el ex secretario general, pase lo que pase en mayo, promete y espera "lealtad".