Ciudadanos ha cerrado este domingo el modelo de su estructura autonómica, un paso que tenía pendiente para afianzarse a nivel territorial y que es clave para lograr el objetivo que se ha marcado Albert Rivera de gobernar a partir de 2019, un objetivo para el que quiere subir "la apuesta" en lo económico y en lo social. En lo económico para ganar la mano a la derecha y, en lo social, a la izquierda, ha dicho Rivera en la primera reunión del Consejo General de C's que, también por primera vez, se celebra fuera de Barcelona.

Una reunión que ha congregado a 144 consejeros (faltan los 17 representantes autonómicos aún por elegir) en la que ha estado muy presente el papel "determinante" de Ciudadanos para que los Presupuestos salgan adelante y permitir así dar estabilidad a la legislatura, tal como ha insistido el líder de la formación naranja durante su intervención.

Por encima ha pasado sobre la crisis de Murcia, donde esta semana se debate la moción de censura del PSOE para apartar a Pedro Antonio Sánchez, una moción que Ciudadanos mantiene que no apoyará a menos que fije una fecha para la celebración de elecciones". Tan solo ha habido algún reproche a "los que la quieren liar en Murcia" y a los que están incumpliendo los acuerdos firmados, refiriéndose Rivera al PP, pero no solo en esa comunidad sino de manera general.

También ha lanzado una advertencia, esta vez al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para recordarle que el hecho de que Ciudadanos apoye los Presupuestos de 2017 "no es un cheque en blanco" para todo su mandato y, por tanto, hay que cumplir "uno a uno" los 150 puntos del pacto de investidura.

La España de la mayoría absoluta "se acabó" del mismo modo que "ha muerto" el bipartidismo", y lo que toca ahora es negociar todo, ha subrayado Rivera, que también se ha dirigido a Podemos, pero sobre todo al PSOE, para que "se moje" con los Presupuestos, que el martes llegan al Congreso para iniciar su tramitación parlamentaria, y deje a un lado sus "trifulcas internas" y "batallas cainitas".

Unas cuentas, ha dicho, cuya finalidad "no es repartir renta ni subvenciones" sino dar "oportunidades", y es ahí -según Rivera- donde está la diferencia entre Ciudadanos y las políticas "rentistas" de Podemos y de la "vieja izquierda". Son unos presupuestos "más naranjas, más justos y que se pueden pagar" al contrario de lo que proponen ellos -ha asegurado- y que han salido sin nuevos impuestos, sin subidas y sin recortes, pero "con políticas nuevas para la clase media".

"Lo hemos conseguido cuadrando el círculo", ha sacado pecho Rivera, recordando las "dificultades" que han tenido para llegar a este punto, desde apoyar la investidura de Rajoy hasta "arrancarle" compromisos a un presidente al que le cuesta moverse, ha apuntado. "Pero no hemos venido aquí a decir que esto es difícil", ha subrayado Rivera aprovechando este momento para insistir en que si algún día gobiernan esperan la "misma reciprocidad" de sus adversarios políticos. Espera, de ese modo, ese mismo apoyo de aquellos que ahora son presidentes del Gobierno o de comunidades autónomas gracias a Cs.

Porque gobernar es el gran reto de Ciudadanos y la nueva dirección quiere que estos cuatro años que tiene por delante antes del siguiente cónclave acaben gobernando, ha dicho Rivera ante los nuevos consejeros "La gran duda es si podemos encabezar esos gobiernos, y yo quiero ser ambicioso", ha subrayado Rivera al afirmar que la meta es encabezar un Ejecutivo nacional y ser también el "revulsivo" que necesitan algunas comunidades, donde tienen gobiernos "conformistas" que manejan datos del paro y de corrupción "intolerables".

Y para poder dirigir sus pasos hacia ese gran objetivo después de diez años de recorrido, Ciudadanos tenía pendiente montar su estructura autonómica, que hoy ha quedado aprobada por unanimidad y que se pondrá en marcha con la elección por las bases de las juntas directivas de las agrupaciones después de Semana Santa.

Sustentada "en la pirámide organizativa de las empresas", la nueva estructura territorial de Ciudadanos nace para afianzar el proyecto de la formación naranja en todas las comunidades, donde el comité Ejecutivo sigue siendo quien designa a los portavoces y a las cinco secretarías ejecutivas.

De acuerdo con este modelo, el comité autonómico funcionará de forma "horizontal", de modo que el portavoz estará acompañado por cinco secretarías ejecutivas, más otros cinco cargos públicos y los coordinadores de los comités provinciales.