El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, se ha reunido este jueves en el Congreso de los Diputados con opositores venezolanos para abordar la gravedad de la situación del país. Tras visitar el Hemiciclo, una de las acompañantes se ha fotografiado con la bandera de su país en el escaño de Pablo Iglesias.

Después de la reunión mantenida con los opositores venezolanos, entre los que se encontraba el padre de Leopoldo López, Rivera y sus invitados han entrado en el hemiciclo, donde han posado con la bandera del país como protesta por la "persecución" política que allí se vive. Después de la foto grupal, Rivera ha subido a su escaño para conversar con parte del grupo mientras una de las visitantes se ha dirigido al escaño del líder de Podemos con la bandera venezolana para inmortalizar el momento. La mujer se ha dirigido a otra de sus compañeras para acompañarla en la foto: "Vente, que aquí se sienta Pablo Iglesias".

El presidente de Ciudadanos se ha desmarcado de este gesto defendiendo el acto mantenido con diputados y líderes de los partidos de la oposición del país: "Me hago cargo de la foto que me he hecho con la hija de Antonio Ledesma, el alcalde de Caracas, y el padre de Leopoldo López. Más allá de eso no sé de qué hablan". Rivera ha mostrado su desconocimiento sobre este gesto, que ha sido recogido por algunas cámaras de televisión mientras él conversaba con varios de los visitantes en su propio escaño. "No puedo hacerme cargo de todas las fotos que se hagan en la Cámara", ha justificado.

"España debe liderar la presión internacional"

El líder de Ciudadanos considera que España debe "liderar la presión internacional" a Venezuela para que convoque elecciones y dé una "salida democrática" al país, y ha reprochado al Gobierno de Mariano Rajoy que no haya estado "a la altura" en este asunto.

Rivera ha calificado de "mala idea" el "dialogo trampa" del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que sólo ha traído consigo "más presos políticos que antes", y ha lamentado también que el Gobierno de Mariano Rajoy no haya estado "a la altura" que otros países que incluso han retirado a sus embajadores. Ha insistido por eso en que España tiene que encabezar la presión internacional para que se saque de la cárcel a los presos políticos venezolanos, se abra un canal humanitario y se convoquen elecciones en ese país.