El ministro de Justicia, Rafael Catalá y el fiscal general del Estado, José Manuel Maza, no han logrado convencer a los partidos de la oposición de la comisión de Justicia del Congreso de los Diputados sobre la idoneidad de Manuel Moix para ocupar la jefatura de Anticorrupción, a pesar de la defensa cerrada que han realizado de él. Los partidos políticos no han ahorrado descalificativos a la gestión de los tres a los que han acusado de "proteger al PP" en los casos de corrupción.

Maza abrió el turno de las comparecencias y defendió con vehemencia "la valentía y firmeza" de Moix al frente de Anticorrupción. Y negó que su subordinado "haya intentado paralizar registros o renovar a fiscales" en alusión a la operación Lezo y el 3%.

El mejor candidato

También defendió que hubiera nombrado a Moix para este puesto hace dos meses porque pensaba y lo sigue haciendo "que era el mejor candidato" y se mostró "muy satisfecho" por esta designación.

Además, atribuyó a "especulaciones" las informaciones que vinculan a Moix con una trama para proteger al PP. Y aseguró que la "dosificación de informaciones" de sumarios que están secretos "no es algo espontáneo". En su opinión, "hay una intención para no colaborar con nosotros contra la corrupción" después de que se hayan conocido varias conversaciones telefónicas en las que Ignacio González, ex presidente de la Comunidad de Madrid, expresara su deseo de que Moix acabara en Anticorrupción.

Control de las filtraciones

Maza ha pedido a los parlamentarios que le "den instrumentos"  para controlar las filtraciones de los sumarios porque en la actualidad estas no se pueden perseguir. Esta propuesta ya había sido lanzada por Moix la pasada semana en los medios de comunicación. Además, el fiscal del Estado insistió en el Congreso en la necesidad de que el fiscal asuma la investigación de los delitos.

Estas palabras no apaciguaron los ánimos de los partidos de la oposición que en bloque reclamaron su dimisión y el cese de Moix. Los parlamentarios no ahorraron descalificativos. "Desde hace meses presuntos corruptos" [González] "estaban maniobrando en todo el entramado político para que Moix fuera nombrado fiscal jefe", aseguró Ignacio Prendes de Ciudadanos.

Por su parte, Juan Carlos Campo, del PSOE aseguró que el diagnóstico de la fiscalía es "de obituario" y manifestó que "todo está urdido por el Gobierno y gestionado" por Maza.

"No pienso ceder"

A pesar de estas críticas, el fiscal del Estado confirmó que no tiene intención de cesar a Moix. "No pienso ceder", apostilló. Y añadió: "Moix no ha intentado paralizar investigaciones ni ha relevado a fiscales" en referencia al caso Lezo y al 3%.

Por su parte, el ministro de Justicia realizó un repaso de la actividad desplegada por su departamento para fortalecer la fiscalía y aseguró que el Gobierno está decidido a "declarar una guerra sin cuartel contra la corrupción". También negó que haya dado indicaciones al fiscal del Estado y se preguntó a quién le interesa "todo el ruido" generado en torno a la fiscalía Anticorrupción.

Asimismo, criticó a los parlamentarios por usar "la política para debilitar y desprestigiar a las instituciones" y afirmó que nunca "ha interferido en una investigación judicial" porque cree en la "autonomía del fiscal".

Acusaciones a Catalá de proteger a corruptos

Estas explicaciones no evitaron que los partidos de la oposición le lanzaran todo tipo de reproches. Pablo Iglesias, de Podemos, le planteó siete preguntas sobre el contenido de las conversaciones del caso Lezo en la que aparece mencionado y le acusó de utilizar el ministerio de Justicia "para proteger la corrupción" y la representante de PDCat Lourdes Ciuró le instó a "asumir su obligación y a estabilizar la nave".

Por su parte, María Jesús Moro, del PP reclamó que se "recupere la ética profesional". Y cuestionó los procedimientos sumarísimos en que se están llevando a cabo "en las nuevas formas de plaza publica sin garantías para el acusado para atacar su fama y su dignidad". Y aseguró que el principio acusatorio se ha sustituido por "el debate con información sesgada".

Juicios de Salem

Por ello, manifestó que el PP "no mata a los medios de comunicación Y agregó que cuando los fiscales tienen que hacer comunicados de prensa, en vez de hacer su trabajo, eso "es Salem, los juicios de Salem".

Por su parte, el ministro de Justicia afirmó que Moix es "un profesional intachable". Y advirtió que acusar a un fiscal de no hacer su trabajo "es muy grave" porque se le está imputando un delito de prevaricación.