Mejora la salud del cerebro. Disminuye las probabilidades de padecer cáncer de colon. Nos aleja de los ictus. Ahora, parece que a la lista de posibles beneficios del chocolate se suma la salud coronaria. La fibrilación auricular es una dolencia que padece uno de cada cuatro adultos en su vida. Es un tipo de arritmia investigada por un equipo internacional que ha realizado un estudio en el encuentran una fuerte asociación entre el consumo de chocolate y un menor riesgo de padecer este tipo de dolencia.

Según recoge la Agencia SINC, los investigadores han visto que esa relación es mayor en mujeres que ingieren una ración a la semana, y de dos a seis porciones en ese mismo periodo en el caso de los hombres. El estudio se publica esta semana en la revista Heart.

Algo huele a chocolate en Dinamarca

Para realizar las pruebas se usaron los datos tomados a 55.500 personas (26.400 hombres y 29.100 mujeres aproximadamente) de entre entre los 50 y los 64 años. Participaban en el proyecto Dieta, Cáncer y Salud del Centro de Investigación de la Sociedad Danesa contra el Cáncer.

Se trata de un estudio de cohorte realizado en Dinamarca que investigaba la asociación entre los hábitos alimentarios, el estilo de vida y el desarrollo de cáncer. Los individuos fueron reclutados entre 1993 y 1997 y vivían en el área de Copenhague y Aarhus.

Fábrica de chocolate Pacari en Ecuador.

Los sujetos dieron información sobre su consumo semanal de chocolate. No especificaban el tipo que comían, aunque el más común en Dinamarca es el chocolate con leche (a partir de un 30% de cacao).

Los datos sobre factores de riesgo que influyen a la hora de sufrir una enfermedad cardíaca, como la dieta y el estilo de vida –aproximadamente uno de cada tres sujetos eran fumadores– se obtuvieron al seleccionar a los participantes del estudio. Se controlaba su estado de salud usando el registro nacional de datos que recoge tanto los tratamientos hospitalarios como los fallecimientos.

El periodo de monitorización de los individuos duró una media de 13,5 años. Durante ese tiempo se diagnosticaron 3.346 nuevos casos de fibrilación auricular entre todos los participantes.

Hubo un 10% menos de arritmias entre los mayores consumidores

Tras tener en cuenta otros factores relacionados con enfermedades cardíacas, se estableció que el número de personas que con esta afección era un 10% menor en el grupo que consumía de una a tres porciones (30 g.) al mes en comparación con las que tomaban una sola ración durante el mismo periodo.

La diferencia también era llamativa en otros niveles de consumo. El riesgo era un 17% menor al tomar una ración diaria; un 20% menos comiendo de dos a seis porciones a la semana; y un 14% menos tomando una o más porciones al día. En el caso de las mujeres, la asociación más fuerte, según el estudio era de un 21% menos de riesgo al consumir una ración semanal, mientras que para los hombres era del 23% tomando entre dos y seis raciones a la semana.

Resultados con cautela

Los propios autores toman estos resultados con cautela y advierten de que este es un estudio observacional del que no se pueden sacar conclusiones de causa y efecto y que, además, cuenta con varios problemas añadidos. También en Heart, los doctores Sean Pokorney y Jonathan Piccini, del Centro para la Fibrilación Auricular de la Universidad de Duke, en Carolina del Norte (EE UU) publican un editorial en el que se pone la nota de precaución respecto al estudio danés.

Advierten en primer lugar que los consumidores de chocolate incluidos en el estudio llevaban una vida saludable y tenían una educación superior. Además, el estudio solo incluía los casos diagnosticados de fibrilación, haciendo más difícil determinar si el consumo de chocolate se asocia efectivamente a un riesgo menor de sufrir esta arritmia o solo a los síntomas obvios de la misma. No obstante, Pokorney y Piccini creen que: “a pesar de las limitaciones del estudio danés, los resultados son interesantes y habría que tenerlos en cuenta dada la importancia de identificar estrategias de prevención para la fibrilación auricular”.

Cajas de ciencia: Chocolate y acné

El chocolate nos encanta. Es un placer culpable porque cuando lo comemos nos suelen salir granos. Sin embargo, los estudios científicos concluyen que no hay alimentos concretos que provoquen acné. Han observado que sí lo agrava el alto consumo diario y frecuente de alimentos ricos en azúcar. Las sociedades que no consumen este tipo de alimentos no tienen granos, como los habitantes de la isla Kitava y la etnia aché de Paraguay. Su dieta consiste en fruta fresca, vegetales y carne.