El precio de la electricidad se encamina a cerrar el año acumulando una fuerte subida. Teniendo en cuenta la evolución hasta ahora del mercado mayorista eléctrico (conocido como pool) y la cotización de los mercados de futuros, el precio medio de la electricidad puede acabar disparándose más de un 30% en todo 2017, con el consiguiente impacto al alza en el recibo de la luz que pagan los más de once millones de consumidores acogidos a la tarifa regulada.

El Gobierno trata de lanzar un mensaje de calma, subrayando que actualmente los precios del mercado eléctrico se sitúan en niveles similares a los de 2015, y que compararlos con 2016 puede resultar engañoso porque el pasado fue un año excepcional, en el que las condiciones meteorológicas hicieron que la electricidad se abaratara de manera inusual. No obstante, si se confirma la evolución al alza en lo que queda de año, el precio medio del pool no sólo superará a 2015, sino que se colocará como el más caro desde 2009.

El Ministerio de Energía descarta introducir cambios en el funcionamiento del mercado mayorista de la electricidad, según ha confirmado el propio secretario de Estado de Energía, Daniel Navia.

El argumento central del Gobierno para mantenerlo como está es que el modelo de mercado que se utiliza en España es el mismo, o muy similar, al de otros 17 países de la Unión Europea y que todos utilizan con carácter general el mismo algoritmo de casación entre oferta y demanda.

Directo al recibo

Pero lo que es una particularidad del sistema español, según critican varias fuentes del sector eléctrico nacional, es utilizar directamente la cotización del mercado mayorista -con sus vaivenes habituales- para fijar parte del recibo de la luz regulado. El precio mayorista para determinar más de un tercio del precio minorista.

El precio del pool -incluso la cotización de cada una de las horas en caso de que el cliente tenga contador inteligente- se usa en España para establecer el coste de en torno a un 35% del recibo final que pagan los consumidores que están acogidos a la tarifa regulada, denominada Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC).

Otro 45% de la factura regulada que pagan 11 millones de consumidores corresponde a los peajes de acceso, los recargos que fija el Gobierno para cubrir los costes reconocidos del sistema eléctrico (transporte, distribución, ayudas a las renovables y al carbón…), y el 20% restante a impuestos.

La electricidad más cara desde 2009

La producción de las centrales hidroeléctricas y de los parques eólicos se ha desplomado en lo que va de año por la sequía y por la falta de viento, lo que está llevando a las eléctricas a sustituirlas con centrales de gas natural y de carbón. Dos tecnologías que -además de provocar más emisiones de CO2- son más caras, lo que está empujando al alza los niveles del pool.

El precio medio del mercado diario –en el que eléctricas y traders compran y venden electricidad para cubrir la demanda del día siguiente- se ha situado en octubre en los 56,79 euros por megavatio hora (MWh), un 7,5% por encima del mismo mes del año pasado y hasta un 15,5% superior a la cotización media registrada en septiembre.

En paralelo, los mercados de futuros –en los que generadores, inversores y traders intercambian electricidad para entregarla en un plazo determinado a un precio fijado de manera anticipada- se han frenado frente a los niveles récord que apuntaban hace sólo unas semanas, pero aún anticipan subidas. Los futuros de noviembre se sitúan por encima de los 60 euros MWh y en diciembre de los 61 euros, según datos de la agencia especializada Montel.

La combinación de la evolución del mercado diario hasta ahora y la cotización de los precios de los futuros hasta fin de año lleva a los expertos a anticipar que el precio medio de la electricidad cerrará 2017 con una fuerte subida. La Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía (AEGE) calcula que el precio medio de la electricidad será de 52,8 euros MWh en el conjunto del año, lo que supone que se disparará un 33% en relación a 2016 y que alcanzará su nivel más alto desde 2009.

De momento, el golpe se ha notado ya muy directamente en el recibo de luz este octubre, registrándose un incremento del 7,2% para el usuario medio en relación al mes anterior y una subida del 3,3% frente a octubre de 2016, según los cálculos de Facua-Consumidores en Acción. Los usuarios acogidos al PVPC, que son los que afecta directamente los vaivenes del mercado mayorista, pagarán 77,25 euros en su recibo, frente a los 74,78 euros de octubre de 2016. Unos cálculos realizados con el consumo de un usuario medio, con una demanda de 366 kWh y con una potencia contratada de 4,4 kW.