Las cadenas regionales de supermercados han visto cómo la facturación se ha disparado desde el inicio de la pandemia. El modelo de proximidad de sus establecimientos -habitualmente en el interior de los núcleos urbanos- ha sido una de las grandes bazas en una etapa marcada por las restricciones de movilidad y por el trasvase del consumo de fuera a dentro del hogar.

Al igual que algunas cadenas muy vinculadas a territorios específicos, el Grupo IFA consiguió cerrar el 2020 con un crecimiento del 11% en facturación, duplicando así la tasa registrada en el último lustro. En total, la central de compras que aglutina a 34 cadenas como Ahorramás (Madrid), Gadis (Galicia), Alimerka (Asturias), Uvesco (País Vasco), Bon Preu (Cataluña), Dinosol (Canarias) o Condis (Madrid-Cataluña) se anotó 15.046 millones en ventas consolidadas, que alcanzan los 32.201 millones de euros si se suman sus redes de Italia y Portugal.

A nivel global, IFA cerró el ejercicio 2020 con 3,26 millones de euros de beneficio neto, lo que supone un aumento del 5% respecto al año anterior. Pero el aumento de la facturación ha ido acompañado además de un incremento en el empleo. Según la memoria anual del grupo, las empresas asociadas en España crearon 4.525 nuevos empleos en 2020; un crecimiento interanual del 5,2%, hasta los 87.742 trabajadores totales en nuestro país.

Según los resultados presentados este martes en su Junta General de Accionistas, el grupo terminó 2020 con una red comercial compuesta por 6.335 tiendas y una superficie de 3,9 millones de metros cuadrados. Gracias a ello, las cadenas asociadas dan cobertura al 82% de la población, con una cuota de mercado por superficie del 19,5% en canal minorista y del 31,1% para el canal mayorista. Según datos de Retail Data, el grupo IFA lidera en 17 provincias españolas por criterios de superficie, entre las que están Madrid, Barcelona o Sevilla.

Los supermercados regionales, muchos de los cuales se agrupan también dentro de la patronal Asedas (Asociación Española de Distribuidores de Autoservicio y Supermercados), hacen gala de estar muy vinculados al desarrollo de proveedores y gustos pegados al territorio, con un modelo de tiendas más sostenible al que se puede llegar siempre caminando y donde es posible realizar una única compra en el canal de proximidad.

Entre otras cosas, el grupo IFA destaca su apuesta estratégica por las marcas de fabricante. Frente al peso que tienen éstas en los lineales de otras cadenas, en los establecimientos asociados a la compañía representan un 23,9% de las compras.

"Nuestra hoja de ruta trazada para el período 2021-2025, nos genera la confianza necesaria para afrontar el futuro con esperanza, optimismo y fuerza para seguir creciendo y ganando en uno de los mercados más competitivos de Europa", ha dicho el director general de IFA, Juan Manuel Morales, que asumirá a partir de julio la presidencia de la patronal europea EuroCommerce.

Consum y Covirán

Al margen de IFA, la cadena valenciana Consum registró en 2020 un 13,3% más de facturación que el año anterior, con 3.324,9 millones de euros. La cooperativa registró además un crecimiento a superficie constante (sin las ventas de las aperturas) del 10,4%. Esto supone siete puntos más que la media del sector de la distribución en España.

Por su parte, la cadena de supermercados Covirán, con sede en Granada, también cerró 2020 con una cifra de negocio de 566,6 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 13,1% respecto a 2019, cuando se anotó 492,2 millones de euros.

A nivel de grupo, Covirán genera 15.560 empleos, de los que 13.654 están en España y 1.906 en Portugal. La cifra supone un incremento del 1,6% respecto a 2019. En 2021, la cooperativa cumple 60 años de vida y presume de que la gestión de la pandemia ha acelerado su proceso de transformación cultural y digital, hacia un modelo más sostenible y eficiente.