La cuarta jornada de huelga de maquinistas de Renfe, que arrancó el pasado jueves y continuará de forma intermitente hasta el próximo 12 de octubre, suma este martes 178 trenes de Cercanías cancelados desde primera hora de la mañana, 46 de ellos en la Comunidad de Madrid. La compañía ha llegado a recomendar no utilizar el servicio y buscar vías alternativas para los desplazamientos, en muchos casos inviables sin recurrir al transporte privado.

En algunos casos, los maquinistas han llegado a interrumpir abruptamente el servicio, como ha sucedido en la estación de Santa Eugenia, al este de la capital, donde se han vivido momentos de tensión después de que varios afectados hayan increpado y golpeado la cabina del convoy afeándole al conductor estar "jugando con el pan de la gente".

Tras los altercados, y ante "el incumplimiento de los servicios mínimos por parte del Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (SEMAF)", Renfe ha pedido a través de sus redes sociales, el uso de un servicio alternativo en la región.

Las escenas de caos en el transporte madrileño son absolutas durante todo el día, llegando a restringirse el acceso a estaciones como Sol ante las aglomeraciones en horas punta.

El Cercanías es uno de los medios más utilizados a diario para los desplazamientos al trabajo en toda la región, y las alteraciones en este servicio complican mucho los trayectos de ida y vuelta al puesto de trabajo. En muchas ocasiones no hay alternativas, o son muy lentas, o son incapaces de absorber a todos los usuarios del Cercanías, como sucede con los autobuses.

El sindicato denuncia que no llegan las cartas de servicios mínimos

La compañía asegura que todas estas cancelaciones se deben a "incumplimientos injustificados y deliberados" de los servicios mínimos por parte de los maquinistas, mientras que el sindicato señala que los trabajadores no reciben las cartas de servicios mínimos.

De hecho, ya ha abierto 31 expedientes a maquinistas de Rodalies de Cataluña y de Cercanías de Valencia que han incurrido en faltas consideradas "muy graves" durante las dos jornadas de huelga convocadas los días 30 de septiembre y 1 de octubre.

Renfe también defiende que "no hay motivos para esta huelga", ya que la empresa dice estar cumpliendo el plan de empleo pactado con los sindicatos y quiere incorporar al servicio este año 920 maquinistas nuevos. "Una parte de estos maquinistas nuevos no se ha podido incorporar por los problemas que pone el propio sindicato de maquinistas para que puedan ser formados y homologados en el interior de las cabinas de conducción", señalan desde Renfe.