Gracias a la creación de nuevas plantas en España, la producción de biogás experimenta un proceso de crecimiento en estos últimos años. Aunque el número de plantas de biogás en España crece de manera progresiva desde hace unos años, la verdad es que el índice de producción de biometano es todavía muy bajo. 

De hecho, las cifras sitúan a España a la cola de los países europeos en este tipo de instalaciones y en la aportación que hacemos a las redes de energía. El número de plantas de biogás en España por habitante es uno de los más bajos del continente europeo, según estudios de Naturgy y su fundación junto a PwC y los de Sedigas. De hecho, en un informe del año 2019 se destacaba que disponemos de 4 por cada millón de habitantes. 

En España, Naturgy es pionera en el desarrollo del biometano, y desde 2014, desarrolla innovadores proyectos para conocer y reducir los costes de producción e impulsar la inyección de los gases renovables en la red de gas. La primera planta de biometano que la compañía puso en operación está en la estación depuradora de aguas residuales de Bens (A Coruña). La segunda instalación, Elena, ubicada en Cerdanyola del Vallès (Barcelona), fue la primera en inyectar a la red de gas de España gas renovable procedente de vertedero.

A nivel regional, los resultados del ‘Estudio de la capacidad de producción de biometano en realizado por la Asociación Española del Gas (Sedigas), en colaboración con PwC y la consultora especializada Biovic, con el objetivo de analizar el potencial de este gas renovable, Cataluña podría producir 14,46 TWh de biometano cada año, lo que supondría el 8.9% de la producción total española. Sería la quinta comunidad autónoma con capacidad de producción de este biogás, después de Castilla y León, Andalucía, Castilla-La Mancha y Aragón, que representarían el 23,2%, el 14,5%, el 12,5% y el 10,8% respectivamente. Estos datos dependen del tipo de residuos disponibles, la cantidad, densidad de población o superficie destinada a actividades primarias, entre otros. 

En la actualidad, Cataluña, Madrid y Castilla y León son tres de las comunidades autónomas en las que se encuentran más instalaciones de producción de biogás y biometano. Destaca especialmente el caso del territorio castellano, con plantas ubicadas en las plantas de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca y Valladolid. Por su parte, Cataluña tiene instalaciones en Barcelona y Tarragona, mientras que en la comunidad madrileña destacan las plantas instaladas en el Parque Tecnológico de Valdemingómez, No obstante, la situación de las plantas de biogás en España es una buena muestra de las carencias de nuestro país en este tipo de instalaciones.

El informe de Sedigas es rotundo en cuanto a la capacidad de producción de España y su escaso desarrollo: España dispone de un potencial de producción de biometano de 163 TWh anuales, con lo que se conseguiría cubrir cerca del 45% de la demanda nacional de gas natural. Su desarrollo, asegura el estudio, podría haber supuesto un ahorro cercano a los 4.000 millones de euros a los consumidores en su factura energética en 2022, principalmente por la reducción de importaciones a países terceros. 

Los expertos han identificado 2.326 plantas potenciales de producción de biometano distribuidas por todo el territorio nacional. En los cinco primeros puestos del ranking estarían Castilla León con 520 plantas potenciales; Andalucía, 334; Castilla la Mancha, 305; Cataluña 248; y Aragón 238.

El desarrollo de estas plantas equivaldría a una inversión de 40.495 millones de euros para todo el territorio nacional, desglosados en 18.792 millones de euros para las plantas de Agro, EDAR o RSU, 14.616 millones de euros para las plantas de cultivos intermedios y 7.087 millones de euros para las plantas de biomasa forestal residual, siendo el total equivalente a un 3,61% del PIB nacional. 

Además, tendría un impacto notablemente positivo en la creación de empleo, especialmente en el entorno rural de muchas comunidades autónomas, contribuyendo a cumplir los objetivos del reto demográfico en España. En total, se generarían 21.736 empleos directos y 40.205 empleos indirectos asociados con la operación y mantenimiento de las plantas de biometano. 

A estos habría que sumarles un total de 34.890 empleos directos y 465.200 indirectos estimados asociados a la construcción de las plantas de biometano, de los cuales un 86% de los directos y un 70% de los indirectos serían de carácter nacional.