España se ha sumado a la expulsión del personal diplomático ruso en España, según ha informado el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros. Tras arremeter contra las imágenes terribles de la ciudad de Bucha, que no ha dudado en considerar como "crímenes de guerra", España se une así a la decisión de otros países de nuestro entorno.

El proceso de expulsión, que afectará a unas 24 personas pero no incluye al embajador, se completará "en los próximos días", ha dicho el ministro, quien abrirá una ronda de contactos con el resto de los Grupos Parlamentarios para explicarles tanto esta decisión como el viaje, el próximo jueves, de Pedro Sánchez a Marruecos. El anuncio de Albares se produce el mismo día en que el presidente de Ucrania, Volodimir Zelesnki, interviene telemáticamente ante el pleno del Congreso de los Diputados.

"Queremos mantener la figura de nuestro embajador allí y del ruso aquí", ha indicado Albares respecto a la decisión de no expulsar al embajador puesto que, hasta ahora, Rusia "ha respondido con una simetría exacta" a este tipo de decisiones. "Lo que no es equiparable", ha subrayado, es el horror de la guerra.

Alemania, Bélgica y Estados Unidos ya han expulsado a diplomáticos rusos

Alemania echó del país a 40 diplomáticos rusos acreditados en la embajada en Berlín. Justificó la decisión tanto porque esas personas “trabajan contra nuestra libertad y contra nuestra cohesión social”, como por la “increíble brutalidad” de los militares rusos en Bucha, informa Ana Alonso.

Bélgica se adelantó unos días, y expulsó de su territorio a 21 diplomáticos rusos por su implicación en operaciones de espionaje e influencia que amenazan la seguridad del país. Las autoridades de los Países Bajos ha enviado de vuelta a Rusia a 17 “oficiales de inteligencia”, por ser “una amenaza para la seguridad”.

Por su parte, Estados Unidos obligó a salir del país a principios de marzo a doce diplomáticos rusos acreditados ante la Organización de las Naciones Unidas, en Nueva York, acusándoles de “participar en actividades de espionaje que son adversas para nuestra seguridad nacional” y Polonia ha hecho otro tanto con 45 diplomáticos rusos.

En cuanto al viaje de Sánchez a Marruecos, no ha aportado el ministro mucho detalle, salvo el convencimiento, a preguntas de los periodistas, de que el giro de España sobre la posición saharui no afecta a las relaciones con Argelia, principal suministrador de gas a España. Tras indicar que no hay agendada ningún visita oficial a este país, define a Argelia como "un socio de primer nivel de España y suministrador fiable. Si por algo es conocido es porque siempre ha cumplido sus contratos internacionales en materia de gas y de petróleo. Es una seña de identidad y España ha constatado siempre su escrupuloso cumplimiento".

Rodríguez interpela a Feijóo que la política de Estado "no se predica, se practica"

Por otro lado, la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, ha reclamado al nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que "la política de Estado no se predica, se practica". A dos días de la entrevista en Moncloa con el presidente del Gobierno, Rodríguez ha asegurado "que claro que queremos acuerdos, lo quiere la ciudadanía y es lo que espera de nosotros". Sin embargo, el Ejecutivo no está por la labor de asumir algunas de la exigencias del PP, como es la rebaja de impuestos, en futuros decretos.

La política económica de nuestro gobierno "es bien conocida", ha apelado, por su lado, la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, también en la misma rueda de prensa. "Por parte del PP solo he oído una propuesta, la rebaja masiva de impuestos que no se corresponde ni con lo que hacen los países de nuestro entorno, ni con lo que necesita España". Dice esperar que el cambio de liderazgo del PP "nos permita tener una colaboración y diálogo como debe existir entre el Gobierno y el primer partido de la oposición".