La Policía ha dado marcha atrás tras la denuncia de Jupol, el sindicato de la Policía Nacional, por ofrecer incentivos a los agentes de la Brigada Local de Extranjería y Fronteras por detener inmigrantes en Irún.

Los agentes criticaban esta medida, firmada por el propio jefe de la brigada porque consideran que "se está empujando para aumentar el número de detenidos por extranjería desde la Jefatura de la Brigada".

Como comparte Jupol en su cuenta de Twitter, esta orden implicaba que, si no se acomete ningún arresto, los policías recibirían 2 días libres; con un detenido la cifra asciende a 3; ya a partir de 2 personas, los agentes recibirían 4 días de compensación; y en caso de detener a 10 inmigrantes o más, se les dotaría de 5 días.

Estos días de compensación se ofrecerían a partir del 1 de julio de 2023 en función del número de detenidos.

Según informa la Cadena SER, el firmante de la orden va a ser investigado para saber por qué se dio luz verde a un mandato de este tipo.