El nombre de Garzón se baraja para las europeas tras su decisión de no ir a las elecciones del 23-J

El ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, solemnizó hace una semana su decisión de dar un paso atrás y no concurrir a las elecciones generales del 23-J. Explicó entonces que su aspiración era promover "la renovación de las caras públicas que representan este necesario proyecto", en alusión a Sumar. "Como republicano, siempre he creído en la renovación de los representantes; es sano para los proyectos políticos y también para la democracia", escribió en una larga carta que colgó en su cuenta de Twitter.

Palabras muy loables e inéditas en un escenario como el español, poco acostumbrado a las dimisiones y abandonos voluntarios de la política. Pero el gesto, que marcaba el camino a la ministra de Igualdad, Irene Montero, parece que puede tener marcha atrás en un año. Y es que, según ha podido conocer El Independiente de fuentes de Sumar, el pacto al que habría llegado con Yolanda Díaz es engrosar la lista al Parlamento Europeo en las elecciones del 9 de junio del próximo año y, en la medida de lo posible, encabezar esa candidatura.

El gesto de Garzón pretendía marcar el camino a Irene Montero para que abandonara

Con este anuncio la intención real era mandar un mensaje a Montero, vetada por Sumar, convertida en el escollo principal de la negociación con Podemos. De hecho, Díaz le agradeció el gesto al ministro de Consumo y a la todavía alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que también anunció su intención e no dar el salto a la política nacional. "Le doy las gracias hoy a una mujer que suma, se llama Ada Colau, ha tomado una decisión. También la ha tomado Alberto Garzón, que sigue sumando". Y a la pregunta de si su compañera de Consejo de Ministros y titular de Igualdad debía dar el mismo paso, arguyó que "creo que esta pregunta hay que formulársela a cada persona".

En el entorno del ministro niegan que sea una salida falsa de la política. "No hay truco ni doble lectura", afirman, sólo "una decisión muy meditada" que se iba a producir en cuanto se convocaran las elecciones generales, aunque el adelanto de Pedro Sánchez aceleró los plazos. Por lo tanto no estaba vinculada "a la disputa en Sumar ni como mensaje a nadie".

En todo caso, Montero no dio un paso atrás aunque la formación morada haya firmado la coalición con Sumar y tragado el sapo del veto a su ministra de Igualdad. Además, la renuncia de Sira Rego, eurodiputada de IU, a ir en la lista por Madrid este 23-J al objeto de evitar un choque con el líder del PCE, Enrique Santiago, puede llevar a ésta a querer repetir el 9-J de 2024. Es decir, no dejaría hueco para Garzón, más habida cuenta de que Rego será posiblemente la nueva coordinadora general de IU en una Asamblea Federal extraordinaria que se celebrará este año.

Acercamiento Díaz-Garzón después de la bronca

En todo caso, Garzón cuenta ahora con el agradecimiento de Díaz y Rego nunca ha sido muy de la confianza de la todavía vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo. Lo cierto es que la relación entre la líder de Sumar y el de IU pasó por momentos muy difíciles, hasta el punto de romper Díaz el carné de Izquierda Unida por discrepancias con él a finales de 2019. Pero desde que fue señalada por el dedo de Pablo Iglesias, se produjo un acercamiento ente ambos en la misma medida en que se distanció de Ione Belarra e Irene Montero.