Un acuerdo insuficiente

El 23 de mayo, seis de las siete asociaciones profesionales de las carreras judicial y fiscal suscribimos el acuerdo logrado con los Ministerios de Hacienda y Función Pública y de Justicia en el marco de la denominada mesa de retribuciones, lo cual llevó a la cancelación de la huelga indefinida de Jueces y Fiscales prevista para el 22 de mayo.

A pesar de los esfuerzos de todas las asociaciones profesionales a lo largo de estos años, el resultado obtenido no cumple con las expectativas. Sin embargo, es importante destacar que representa un avance palpable y aplicable a toda la carrera judicial, tras veinte años de absoluto abandono de nuestro marco retributivo. 

Este acuerdo es insatisfactorio por muchas razones. Los Jueces solamente recuperan en torno al 7% del 20% de su poder adquisitivo perdido en estos años. Las guardias se siguen pagando a menos de tres euros la hora de guardia. Los grupos poblacionales siguen sin adecuarse a la realidad española actual. Los trienios siguen calculándose a la baja. Y el complemento de carrera profesional sigue sin desarrollo normativo.

Todas las asociaciones profesionales somos conscientes que no hemos conseguido lo que nos propusimos, pero no debemos poner excusas

Sin embargo,  hemos logrado compromisos y plazos que no habíamos conseguido nunca. A partir de ahora, la mesa de retribuciones se vuelve más flexible y se reunirá anualmente para adaptar la estructura salarial a la realidad de la carrera judicial de manera más ágil. Se crean grupos de trabajo para abordar temas como la recuperación de la pérdida de poder adquisitivo pendiente, la remuneración de las guardias, grupos poblacionales, trienios, carrera profesional y otros complementos especiales incluidos en dicha estructura. Todo esto se llevará a cabo con la participación efectiva de los responsables de Hacienda y Función Pública, lo que implica una comunicación directa, algo que nunca antes se había logrado, entre las asociaciones y los máximos responsables de nuestra estructura y remuneración.

Con este acuerdo, las asociaciones profesionales se enfrentaban a la disyuntiva de aceptar y desconvocar la huelga indefinida (cosa que hicieron cuatro de las cinco convocantes) o no aceptar y cumplir con la amenaza de huelga. Defender la concurrencia de otra posibilidad real es faltar a la verdad a la carrera judicial y fiscal, y a la propia ciudadanía. 

Lo sucedido esta pasada semana me hizo recordar la fábula del zorro y las uvas, atribuida al sabio griego Esopo,  en la que un zorro ve un racimo de uvas colgando de una vid y se esfuerza por alcanzarlas saltando repetidamente. A pesar de sus intentos, no puede alcanzar las uvas y finalmente se da por vencido, diciendo que las uvas estaban verdes y no valían la pena. 

Pero las uvas, como en la fábula, no estaban verdes. El hecho de no lograr el acuerdo que merece la carrera judicial, no puede servir para minimizar su importancia o valor. Todas las asociaciones profesionales somos conscientes que no hemos conseguido lo que nos propusimos, pero no debemos poner excusas, debemos seguir transitando por el camino que se nos presenta,  porque es en la acción donde se encuentra el verdadero progreso. En lugar de promesas, la carrera judicial quiere ver acciones concretas y resultados tangibles.

Y en esa lucha de objetivos comunes es necesario contar con el valor extraordinario de los miembros de todas las asociaciones profesionales, y con su diversidad. Tenemos que recuperar nuestra capacidad de dejar de lado las diferencias del pasado y enfocarnos en un futuro común, para caminar juntos por el bien de la carrera judicial y fiscal. 

Sergio Oliva Parrilla es magistrado y miembro del comité nacional de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria