El presidente de Argelia, Abdelaziz Bouteflika, ha notificado este martes al presidente del Consejo Constitucional su dimisión, según ha informado la agencia estatal argelina de noticias, APS. La decisión de Buteflika ha llegado minutos después de que el jefe del Ejército, Gaid Salá, reclamara la aplicación "inmediata" del artículo de la Constitución que permite la inhabilitación del mandatario por motivos de salud.

Cientos de miles de argelinos se han manifestado en las últimas semanas en numerosas ciudades del país para reclamar la salida del poder de Bouteflika y su círculo cercano, una oleada de protestas que arrancó cuando el mandatario anunció su decisión de presentarse a un quinto mandato.

Bouteflika, gravemente enfermo, es un presidente desaparecido públicamente, pero su cada vez más reducido círculo de poder había tratado de fortificarse alrededor de su figura. Las masivas protestas que desde hace semanas se suceden en las calles de Argelia han terminado por forzar al Ejército a posicionarse contra el presidente y no continuar reprimiendo las movilizaciones.

La decisión del presidente ha llegado horas después de que Bouteflika anunciase que renunciaría antes del 28 de abril, cuando debía terminar su cuarto mandato presidencial. Bouteflika alcanzó la presidencia de Argelia en 1999. Nueve años después, reformó la Constitución para permitirse un tercer mandato. Ahora, pretendía optar a un quinto mandato en las elecciones presidenciales del próximo 18 de abril.

El dirigente, sin embargo, lleva los últimos cinco años postrado en una silla de ruedas, sin pronunciar discursos en público y sin desplazarse al extranjero. La perspectiva de un nuevo mandato en esas condiciones causó la indignación y las protestas que se suceden desde hace más de un mes.