Sin la semana previa de celebraciones, con asistencia estrictamente reducida y con una ventaja local insólita en las 54 ediciones previas: el espectáculo del año en Estados Unidos se ha quedado como las bolsas de patatas del supermercado, medio vacío. La Super Bowl LV estará marcada esta noche por la pandemia, una frase que se ha adaptado a nuestras rutinas como la lycra al cuerpo. El Raymond James Stadium de Tampa (Florida) acogerá, en la 55ª final, a dos equipos con varios alicientes en sus filas: los Tampa Bay Buccaneers se convirtieron en la comidilla del corral después de la llegada del seis veces campeón Tom Brady; los Kansas City Chiefs defienden la corona con el joven Patrick Mahomes como referencia, pues ya consiguió ser MVP de la final de 2020.

Los Kansas City Chiefs, dirigidos por el veterano Andy Reid, se impusieron a los San Francisco 49ers para ganar, por primera vez desde 1970, el codiciado trofeo de la NFL (National Football League) en su edición LIV. Mahomes era el gran favorito entonces, como ocurre ahora, pero en la final del domingo 7 (madrugada del lunes 8 en España) tendrá que enfrentarse al histórico Tom Brady. La guerra entre quarterbacks está asegurada.

"Tendremos que demostrar en el campo que somos los mejores", indicó Mahomes. "Mi objetivo es hacer mejor a mi equipo y lograr la victoria. Los premios individuales quedan en un segundo plano", señaló en referencia a las preguntas de si el joven de 25 años se volvería a alzar con el trofeo de mejor jugador de la Super Bowl. Las apuestas apuntan sus flechas hacia la diana del quarterback de los Chiefs, que superaría al veterano Brady.

Super Bowl LV
Super Bowl LV. EFE

Derrotando a los Buccaneers (que harán historia al ser el primer equipo que dispute la Super Bowl como local en su estadio), los Chiefs de Andy Reid repetirían como campeones en dos ediciones consecutivas, un hecho que no se daba desde que los New England Patriots (exequipo de Brady) lo consiguieran en 2004 y 2005. Así, el Raymond James Stadium enfrentará a la veteranía con el estrellato: Brady no solo ha ganado seis trofeos con los Patriots, también ha participado en un total de diez Super Bowl, la última con el conjunto de Tampa. Además, doblega en edad (43 años) al joven Mahomes.

Tampa, la tercera ciudad más poblada de Florida, acogerá una final atípica, marcada por el virus y con extremas medidas de seguridad para evitar sobresaltos en un evento masivo y con influencia mundial.

Touchdown, y no olviden su mascarilla

Como todos los eventos deportivos en la era del Covid-19, la pandemia ha obligado a reducir el aforo del Raymond James Stadium, que cuenta con 75.000 asientos que han quedado reducidos a 22.000 (subiendo a los 25.000 al contar al personal que trabajará durante el encuentro). De esta forma, las autoridades locales y los responsables de la NFL quieren evitar pecar de imprudentes.

Además de un público reducido a la mitad, los grandes eventos que acompañaban a la Super Bowl se han cancelado. La semana previa de celebraciones se ha convertido en un recuerdo obsoleto y Walt Disney ha anunciado que tampoco organizará el tradicional desfile en homenaje al campeón.

El doctor Anthony Fauci, experto en enfermedades infecciosas y la cara más visible de la lucha contra la pandemia en Estados Unidos, ha advertido a los ciudadanos estadounidenses que eviten celebrar fiestas en casas para ver la final, pues se convertirían en un foco de "súper propagación".

Unos aficionados de los Buccaneers con las camisetas de Tom Brady y Rob Gronkowski. EFE

"No quieras hacer fiestas con gente con la que no has tenido mucho contacto", comentó Fauci al programa Today de la cadena NBC. "Uno no sabe si están infectados, así que por muy difícil que sea, calmen su impulso de celebrarlas".

La NFL tiene preparado un paquete individual (que incluye mascarilla, gel hidroalcohólico y una guía con protocolos y pautas) que se entregará a cada asistente al choque entre Buccaneers y Chiefs en el Raymond James Stadium.

¿Actuará Rosalía con The Weeknd?

Se confirmó, se negó, se consideró un rumor y la noticia alcanzó un pico que se desinfló a las horas. Según el medio colombiano Semana, Rosalía sería una de las principales invitadas al Half Time Show (el espectáculo del descanso) que este año lidera el artista canadiense The Weeknd.

Muchos apuntan hacia una noticia falsa que subió como la espuma, estimando así que la catalana no estará el próximo domingo en la final de Tampa. Aunque Rosalía ni confirmó ni desmintió, sigue existiendo la posibilidad de que todo se esté guardando bajo llave en el secretismo más absoluto.

La idea de que la cantante de Malamente hiciera su aparición estelar en la Super Bowl LV tiene cierto sentido, pues hace unos meses colaboró con The Weeknd en el remix de Blinding Lights, tema que forma parte de uno de los considerados como mejores discos de 2020, el After Hours del canadiense.

A la espera de confirmar si fue una broma pesada o el rumor peor guardado de la historia, Rosalía podría convertirse en la primera artista femenina española en participar en una Super Bowl, después de que Enrique Iglesias lo hiciera en el año 2000 en la categoría masculina.

Además de los rumores que apuestan por la presencia de la catalana en el escenario del Half Time Show, las especulaciones también incluyen en la mezcla a la estrella americana del pop Ariana Grande, y al dúo electrónico francés Daft Punk.

Sin embargo, el famoso portal americano TMZ, que se entera hasta de la lista de la compra de las celebridades, afirma que Abel Tesfaye (nombre real del artista) no contará con ningún invitado para su performance en el Half Time Show, pues la idea con la que The Weeknd parte para el espectáculo necesita que él sea el único protagonista. Será el primer canadiense en enfrentarse al reto.

Entre otros artistas confirmados, la camaleónica Miley Cyrus realizará un concierto previo al encuentro dedicado a los ‘invitados de honor’ al evento, y que se retransmitirá en directo a las masas por medio de la red social centennial por excelencia: TikTok. Este evento especial contará con la presencia de un conjunto de sanitarios de la ciudad de Tampa y del resto del país.

Amanda Gorman recitará a los héroes

En la investidura de Joe Biden, la joven poeta Amanda Gorman (22 años) sorprendió y conmovió durante cinco minutos con The Hill We Climb, un texto que animaba a sus compatriotas a pasar página de la convulsa y reciente historia vivida con el mandato de Donald Trump. La repercusión del texto fue tal, que la NFL la ha invitado para que recite un poema original que reconocerá a tres capitanes honorarios de la Super Bowl.

Los tres héroes cotidianos son Trimaine Davis, un profesor de Los Ángeles que ayudó a conseguir ordenadores portátiles e internet para sus alumnos durante las clases online que se sucedieron a raíz de la pandemia; Suzie Dorner, una enfermera del Hospital General de la Bahía de Tampa que gestiona la UCI; y James Martin, un veterano de la Marina que participa en el Proyecto Guerrero Herido (una organización benéfica que ofrece programas, servicios y eventos para los veteranos heridos en las acciones militares posteriores al 11-s).

El trofeo Vince Lombardi. EFE

Como publicó El País, Gorman pasó una temporada en Madrid entre febrero y junio de 2019, tiempo en el que entró en contacto con Federico García Lorca y con clásicos de nuestra literatura como La casa de Bernarda Alba. Fue en la capital cuando escribió sus primeros poemas en castellano.

Jennifer López y Shakira, un cielo alto al que aspirar

Un Hard Rock Stadium de Miami abarrotado y dos artistas que llenaron el escenario como pocos en el famoso Half Time Show de la Super Bowl. La final de 2020 reunió a 102 millones de espectadores solo en Estados Unidos, y el espectáculo del descanso de Shakira y Jennifer López se convirtió en historia televisada. Los casi 200 millones de reproducciones del vídeo que la NFL colgó en YouTube lo certifican.

La actuación de Shakira y Jennifer López en la Super Bowl LIV.

Poderío, reivindicación y un concierto express por el que nadie daba un duro al juntar, por primera vez, a dos artistas latinas compartiendo escenario. Los críticos tildaron la actuación de puro furor y fuego. Los aplausos se sucedieron al día siguiente entre medios y comentarios en redes sociales. Shakira y J.Lo habían conseguido aunar los ingredientes esenciales para entretener al público durante los 15 minutos que dura el espectáculo, un resultado que no llegaron a alcanzar participantes previos como Maroon 5, Coldplay o Justin Timberlake.

Tras la explosiva y despampanante actuación, la Comisión de Comunicaciones de Estados Unidos recibió 1.300 quejas que tildaron de “pornográfica” la actuación de las artistas latinas.

A The Weeknd se le antoja una complicada tarea, aunque el canadiense tiene pólvora de sobra. A pesar de que no tendrá el mismo aliento del público con el que contaron las latinas, en unas imágenes pre-Covid que generan ansiedad y envidia a partes iguales, su Blinding Lights puede curar todos los males en el Raymond James Stadium de Tampa: fue la canción más escuchada en todo 2020 en Spotify, con cerca de 1,6 billones de reproducciones en la plataforma musical.

La final será en la madrugada del lunes 8 de febrero a partir de la 00:30 horas, y en España se podrá ver en Movistar+.