La Policía Nacional ha desmantelado un grupo criminal que actuaba en las provincias de Madrid y Toledo que llegó a estafar unos 250.000 euros tras suplantar la identidad de 140 clientes de banco.

La investigación se inició el pasado mes de enero cuando la Policía conoció la existencia de una banda organizada especializada en las estafas bancarias. El grupo criminal contaba con un grupo de carteristas encargados de sustraer los documentos en el transporte público de Madrid y Toledo.

Posteriormente, los carteristas facilitaban a la organización la documentación que habían sustraído y otros miembros de la banda se hacían pasar por clientes ante las entidades bancarias en donde abrían nuevas cuentas.

Según informa la Dirección General de la Policía, han sido detenidas 39 personas y se han recuperado 281 documentos sustraídos, tres falsificados y 20 carnés de conducir robados dispuestos para cometer nuevos delitos.