Nunca ha dejado de escucharse música, pero la música se había dejado de vender. La revolución digital había dejado a la industria sin modelo de negocio. Entrados en el siglo XXI la música entró en crisis con los soportes digitales y la piratería, pero la misma evolución del mundo digital que ha abandonado los soportes físicos (CDs, pinchos USB) para vivir alojado en la web, ha convertido al streaming en el mejor aliado de la música.

El 45% de las personas escuchan música en el mundo, lo hacen por un servicio de Streaming.

Así lo constatan los datos del Music Consumer Insight Report 2017, el último informe de la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI). El 45% de las personas escuchan música en el mundo, lo hacen por un servicio de Streaming. La cifra en 2016 era de 37%. Los ingresos por las suscripciones digitales en plataformas como Spotify, Apple Music, Google Play, Deezer, Napster o Amazon Music Unlimited (que acaba de lanzarse en España) han pasado de 17,6 a 24,9 millones de euros en el semestre, lo que equivale a un 41% de incremento.

Según Promusicae, la organización de productores de música de España “el problema con que se puede encontrar el mercado español proviene del streaming de audio financiado con la inserción de publicidad. En el primer semestre las cifras se mantuvieron estancadas en la misma cifra que el año anterior (15,8 millones de ingresos), lo que anticipa unas previsiones poco favorables en este apartado. Las recientes renovaciones y revisiones de contratos entre Spotify y las compañías (ya hay acuerdos en vigor con Universal, Sony, Warner Music y Merlín, como representante de las compañías independientes) penalizan el streaming en la modalidad gratuita, que aún goza de gran implantación en España, a diferencia de lo que sucede en los principales países de nuestro entorno”, ha destacado en un comunicado.

La música se ve, pero no da dinero

Las visualizaciones de vídeos de música a través de YouTube o Vevo, plataformas gratuitas y financiadas con inserciones publicitarias (video streams), también experimentan una significativa subida del 43,5%, al crecer de 6,5 a 9,3 millones de ingresos generados. Tanto desde Promusicae como  desde IFPI se señala la paradoja de que estos videos sean la principal fuente de consumo de música, pero sólo se traduzcan en un 18% del total de ingresos por streaming.

El 96% de los internautas españoles visitaron el año pasado en algún momento YouTube, y, de estos, el 90% lo utilizaron para escuchar música, según consta en el Music Consumer Insight Report 2017.