A pocos días del gran debate electoral, que se celebrará el próximo 4 de noviembre, todavía faltan por cerrar algunos detalles importantes de la cita. Uno de los más importantes tiene que ver con la forma en la que se desarrollará el coloquio. La Academia –la organizadora- había pactado con los partidos políticos que no incluyera preguntas, pero las televisiones que lo emitirán rechazan esta decisión, al considerar que es anti-periodístico.

La discrepancia se ha escenificado en las más recientes conversaciones que han mantenido las partes, en las que algunos partidos han expresado sus dudas con el cambio que han propuesto Atresmedia y Mediaset. Esta mañana, todavía no se había alcanzado un acuerdo al respecto, según señalan fuentes de la organización.

Hay que recordar que el coloquio se celebrará en el Pabellón de Cristal de la Casa de Campo y estará moderado por Ana Blanco y Vicente Vallés. Contará con cinco bloques temáticos, que estarán dedicados la cohesión de España, economía, política social e igualdad, calidad democrática y política internacional.

María Casado –que tiene un programa en TVE- hará de ‘maestra de ceremonias’ y recibirá a los candidatos en el recinto, como presidenta de la Academia de Televisión. Esta asociación organizará los detalles del encuentro y pasará la factura a las televisiones, que ascenderá a 585.000 euros (alrededor de 700.000 con IVA) y que pagarán de forma proporcional a la audiencia que registren durante el debate. Cuantos más espectadores reúnan, mayor será el coste.

Según ha adelantado El País  y ha confirmado este periódico, la forma de negociar el formato del debate por parte de la Academia ha causado un notable malestar entre las televisiones, puesto que consideran que el hecho de que no tenga preguntas lo hará demasiado encorsetado y no favorecerá el intercambio entre los participantes.

De hecho, añaden estos informantes, beneficiará a los candidatos que menos ‘tablas’ tengan en este tipo de citas, dado que hará más previsible la actuación de los moderadores.

Sea como fuere, las televisiones confían en que los partidos finalmente acepten la propuesta, entre esta tarde y mañana, jueves.