Irene Montero se está haciendo todo el circuito de hija de Julio Iglesias o algo así, que no pasa precisamente por ese Vallecas de burros muertos y barricadas de latas de sardinillas que Podemos describe y al que se siente tan cercano. Montero ha posado esta vez para Vanity Fair, una revista que les toma el pelo a todos o que nunca entendió la ironía de llamarse como la novela satírica que va de eso, de las vanidades de una sociedad de vuelillo, pose, ambición, desmayito y roña. En cualquier caso, Diez Minutos es una cosa de peluquería pero Vanity Fair ya es de clínica láser, así que Montero va ascendiendo como por una escalinata de vedete o una pirámide de Ferrero Rocher, mezclando el orgullo de barrio con gasa de diamante, al final más como Sara Montiel que como la Preysler.
Todas las claves de la actualidad y últimas horas, en el canal de WhatsApp de El Independiente. Únete a nuestro canal de Whatsapp en este enlace.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 El independentismo ataca a Antena 3 y Telecinco en Cataluña
- 2 Vídeo | Un oso en la carretera de Asturias
- 3 Un guardia superviviente de Barbate: "El sargento advirtió de que con esa embarcación pequeña nos podían pasar por encima"
- 4 El TJUE abre la puerta a prestaciones ‘transfronterizas’
- 5 Así será el lujoso hotel que Rafa Nadal abrirá este verano en Girona
- 6 La batalla de la hermanastra judía de Mohamed VI de Marruecos
- 7 Máximo Huerta se pregunta quién nos cuidará de viejos
- 8 Marruecos impulsa una nueva cátedra en España tras la paralizada en Salamanca
- 9 Romy Mars, la nieta nepobaby de Francis Ford Coppola en Cannes