El etarra Francisco Javier Balerdi Ibarguren ha salido hoy de la prisión de Herrera de la Mancha (Ciudad Real), donde ha permanecido los últimos 20 años tras ser detenido en 1992 por su participación en cinco asesinatos. Balerdi Ibarguren, que ingresó en prisión con 24 años, ha salido del penal manchego a las 9.30 horas de este miércoles portando una gran bolsa con sus pertenencias.
A su salida, ha sido recibido por varios familiares, tres mujeres y un hombre, que lo han abrazado, y se han marchado en una furgoneta de color blanco. Desde 1989 Balerdi Ibarguren participó en cinco asesinatos con otro terrorista, Juan Ignacio Ormaechea Antepara, que falleció en agosto de 1991 en un enfrentamiento con la Guardia Civil.
Uno de los asesinatos fue el ametrallamiento, el 2 de enero de 1991, del coche del gobernador militar de Guipúzcoa, el coronel Luis García Lozano. Otro ocurrió el 13 de marzo de 1990, cuando asesinó de un tiro en la cabeza, en presencia de su mujer y de su bebé de cinco meses, al que llevaban en brazos, al funcionario de prisiones en el penal de Martutene (San Sebastián) Ángel Jesús Mota Iglesias, que falleció al día siguiente.
Por este último asesinato, Ibarguren, que trabajaba como empleado del grupo de Herri Batasuna en el Ayuntamiento de San Sebastián, fue condenado en 1994 a treinta años de prisión. Los últimos veinte años ha estado en la cárcel de Herrera de la Mancha, pero en total ha pasado 24 años y medio en prisión.
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