El Gobierno estadounidense se dispone a retirar la autorización para la construcción de los parques eólicos marinos de New England Wind 1 y 2, ubicados en el Estado de Massachusetts, lo que amenazaría la continuidad de los proyectos en los que participa Avangrid, filial estadounidense de Iberdrola.

La noticia, que ha sido adelantada por Bloomberg citando documentos judiciales, se enmarca en la cruzada del presidente Donald Trump contra este tipo de energía renovable.

En este sentido, las órdenes de suspensión de obras y las retiradas de permisos, o la amenaza de hacerlo, ya han paralizado otros cuatro parques eólicos 'offshore' de la Costa Este solo en lo que va de año, incluso aunque alguno estaba terminado al 80%.

Nada más tomar posesión del cargo en enero, Trump emitió una orden ejecutiva que suspendía temporalmente los nuevos contratos de concesión para la energía eólica en aguas de las costas del país, al tiempo que exigía una revisión de las prácticas de arrendamiento y concesión de autorizaciones del Gobierno federal para estos proyectos.

Según la Casa Blanca, dicha medida se enmarca en la necesidad de "garantizar que Estados Unidos pueda mantener una industria pesquera sólida para las generaciones futuras y proporcionar energía de bajo coste a sus ciudadanos". En cambio, la concesión relacionada con otros fines, como la extracción de petróleo y gas, no se vio afectada.

Fuentes de Iberdrola indicaron que la posible decisión del presidente Trump de paralizar estos nuevos proyectos no comprometería su cartera de crecimiento en el país.

Los títulos de Iberdrola apenas se resintieron en Bolsa por la publicación de la noticia.