El magistrado del Tribunal Supremo, Leopoldo Puente, ha convocado a José Luis Ábalos y Koldo García el próximo 27 de noviembre para la celebración de una 'vistilla' en la que se revisará su situación de libertad. El instructor atiende a la petición de la Fiscalía Anticorrupción y de las acusaciones de revisar si procede modificar las medidas cautelares acordadas sobre ambos investigados.

La comparecencia prevista en el artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, comúnmente conocida como 'vistilla', se celebra para resolver si procede la modificación de las medidas cautelares impuestas. Cabe recordar que tras su declaración el pasado mes de octubre, el juez acordó mantener en libertad al exministro y al que fuera su hombre de confianza, al entender que aunque existe riesgo de fuga este no sería suficiente para decretar su ingreso en prisión.

En esta ocasión, y a la vista de la gravedad de los delitos que se le imputan a ambos, el juez podría considerar que existen motivos para decretar su ingreso en prisión provisional, bien por riesgo de fuga, o bien, por existir riesgo de destrucción de pruebas.

Las acusaciones, lideradas bajo la dirección letrada del Partido Popular, han pedido que entren en prisión de manera provisional, mientras se refuerzan los indicios contra ellos tras el último informe de la UCO. Asimismo, piden 30 años de cárcel por la pieza principal de la causa, conocida como 'caso Mascarillas'.

El fiscal jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón, ha pedido 24 años para José Luis Ábalos y 19 años de prisión para Koldo. Para el empresario Víctor de Aldama el Ministerio Público pide siete años.

Asimismo, Anticorrupción ha pedido la comparecencia de casi 40 testigos entre los que destacan varios ex altos cargos del Gobierno de Pedro Sánchez. Entre los testigos propuestos destacan nombres como el de Carlos Moreno, jefe de Gabinete de la ministra de Hacienda María Jesús Montero; el que fuera jefe de gabinete de Teresa Ribera, Juan Ignacio Díaz Bidart.

También destacan los nombres de la expresidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, del exCEO de Air Europa, Javier Hidalgo, o la expareja de Ábalos, Jésica Rodríguez.

En su escrito de acusación, el fiscal detalla como José Luis Ábalos favoreció a determinadas empresas para la concesión de contratos sanitarios a cambio de "una indebida compensación económica procedente de Víctor de Aldama quien, a su vez, se benefició en términos económicos de las comisiones que le reportaba la realización del mencionado ilícito negocio".

Para esta tarea el 'exnúmero dos' del PSOE se sirvió de la ayuda de Koldo García al que describe como su "alter ego" de José Luis Ábalos durante su mandato al frente del Ministerio. Al respecto, añade cómo otras Administraciones Públicas, se sobreentendía que Koldo García era "el fiel transmisor de las decisiones y los deseos de José Luis Ábalos, habitualmente parapetado tras su asesor".

Asimismo, Luzón señala al exasesor ministerial como la persona encargada de "manejar las fuentes ilegales de dinero en efectivo de José Luis Ábalos, que con frecuencia se confundían con las propias". Este actuaba como presunto testaferro de su jefe con la colaboración de Víctor de Aldama, algo que también se extendió a los beneficios procedentes del presunto cobro de mordidas del amaño de obras públicas.