Emma Watson ha vuelto a ser Hermione Granger. La actriz británica, tras varios años alejada de la prensa, ha concedido varias durante estos días. La artista de 35 años ha reaparecido en varios medios para reflexionar sobre su vida, su carrera y uno de los asuntos más delicados y polémicos de su trayectoria: su relación con J.K. Rowling, la autora de la saga Harry Potter, a quien conoce desde que era una niña y comenzó a rodar las películas.

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En una conversación con Variety, Watson confesó que sigue guardando cariño a la escritora, pese a las diferencias que las han distanciado públicamente. "Realmente no creo que haber tenido esa experiencia y sostener el amor, el apoyo y las opiniones que tengo signifique que no pueda valorar a Jo y a la persona con la que compartí vivencias personales", explicó.

"Nunca creeré que una cosa niega la otra, ni que mi experiencia con esa persona no pueda conservarla y atesorarla. No pienso que estas cosas sean excluyentes. Mi mayor deseo es que, aunque alguien no esté de acuerdo con mis opiniones, pueda seguir queriéndome, y yo también pueda seguir queriendo a personas con las que quizá no comparta las mismas ideas".

El distanciamiento entre Watson y Rowling se remonta a 2020, cuando la autora escocesa publicó en redes sociales varios mensajes considerados tránsfobos por parte del colectivo LGTBIQ+ y de numerosos seguidores de la saga. Aquel episodio provocó una fuerte polémica internacional y generó un debate que aún sigue vivo sobre la libertad de expresión, la identidad de género y el impacto de las palabras de una figura con la influencia global de Rowling.

Emma Watson, junto a otros intérpretes de la saga como Daniel Radcliffe y Rupert Grint, se posicionó entonces en defensa de las personas trans, subrayando su apoyo a la comunidad y marcando así una línea de separación respecto de las palabras de la creadora del universo mágico que la catapultó a la fama.

En otra entrevista, en el podcast de Jay Shetty, Watson profundizó más en su relación con J.K. Rowling y las razones que la llevaron a distanciarse de ella. "Nada podría anularla a ella ni lo que hizo por mí. Eso tiene que seguir siendo verdad. Y lo es", explicó. "No sé qué más hacer que sostener estas dos cosas que parecen incompatibles al mismo tiempo y esperar que un día se resuelvan, o aceptar que quizás nunca lo hagan, pero que ambas pueden seguir siendo ciertas. Y yo puedo quererla".

La actriz añadió que ese vínculo con la autora de Harry Potter forma parte inseparable de su vida y de su carrera: "Puedo saber que ella me quiso. Puedo estar agradecida con ella. Puedo reconocer que las cosas que dijo son ciertas. Y eso puede convivir con todo lo demás. Siento que mi tarea es simplemente sostenerlo todo. Pero lo más importante es que lo que ella hizo nunca podrá serme arrebatado".

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