"Un intenso y concentrado bombardeo israelí utilizando cinturones de fuego está golpeando las zonas oriental y meridional de la ciudad de Gaza". El periodista palestino Anas al Sharif, reportero de la cadena Al Jazeera, vio venir la muerte. De hecho, dejó otro mensaje póstumo. "Esta es mi voluntad y mi último mensaje. Si estás leyendo estas palabras será porque Israel ha logrado matarme y silenciar mi voz". A última hora del domingo el Ejército israelí mató a Anas al Sharif y a otros cuatro miembros del equipo de Al Jazeera en Gaza. Israel no quiere testigos de su operación final en Gaza, aprobada a finales de la semana pasada, con el rechazo de gran parte del Ejército y de la sociedad israelí.

El comunicado de las Fuerzas Armadas israelíes confirma que Anas al Sharif era objetivo de su ataque de precisión. Según Israel, Anas al Sharif "se hacía pasar por periodista de la cadena catarí Al Jazeera". Israel ya había señalado al reconocido periodista, uno de los más conocidos del enclave, en varias ocasiones, si bien nunca ha presentado pruebas verificables de su afiliación a una milicia, según la agencia Efe.

Minutos antes de la medianoche del domingo, Al Jazeera informaba de que Al Sharif había muerto en un bombardeo contra la tienda de campaña para periodistas situada cerca del hospital Shifa de la capital gazatí.

Poco antes de perder la vida, Al Sharif también compartió en redes sociales otro texto sobre la expansión de la ofensiva israelí en la capital: "Si esta locura no termina, Gaza quedará reducida a ruinas, las voces de sus gentes silencias, sus caras borradas. Y la historia los recordará como testigos silenciosos de un genocidio que decidieron no detener".

Junto a Al Sharif murieron tres periodistas más: el reportero Mohammed Qreiquea, también de Al Jazeera, y los fotógrafos Ibrahim Zaher y Mohamed Aliwa, además de su conductor, Mohammed Nofal, que también ayudaba en las labores de fotógrafo.

En unas imágenes de la cadena se ve a decenas de hombres trasladando en una camilla uno de los cadáveres amortajados entre cánticos de "Alá es grande".

Con ellos cinco, el recuento del Gobierno gazatí de informadores muertos a causa de la ofensiva israelí asciende a 237, en una lista que incluye a periodistas, influencers y otros creadores de contenido.

Israel lo vincula a Hamás

El Ejército israelí asegura que Al Sharif estaba vinculado al grupo islamista Hamás. Ha presentado dos documentos que no han podido ser verificados. Uno de ellos es una 'lista de operativos de Hamás en la brigada norte de la Franja de Gaza'. En ella, se registra que resultó herido en 2019 como miembro del grupo, al que presuntamente se afilió en 2013, con 17 años.

Otro documento en el que se registran aflicciones de presuntos miembros de la organización incluye una entrada en la que Al Sharif figura como herido por una explosión en 2017.

En octubre de 2024 Israel publicó por primera vez estos documentos, y señaló a Al Sharif como uno de sus objetivos. Entonces Reporteros Sin Fronteras (RSF) señaló: "La mera publicación de estos documentos no constituye prueba suficiente de afiliación o licencia para matar".

La cadena catarí es el principal medio extranjero que informa desde el enclave. Israel no permite el acceso a la prensa internacional de forma independiente. Decenas de organizaciones internacionales han pedido a Israel que facilite la entrada de los medios sin éxito.