El escándalo de corrupción que azota al Gobierno de Ucrania se ha llevado por delane a Andriy Yermak, quien era la mano derecha del presidente, Volodimir Zelenski. "Estoy agradecido a Andriy por presentar siempre la posición ucraniana en la vía de negociación tal y como debe ser. Siempre ha sido una posición patriótica. Pero no quiero que haya rumores ni especulaciones", ha dicho Zelenski en un discurso difundido en su canal de Telegram. "No quiero que nadie tenga ninguna duda sobre Ucrania".

Este sábado realizará consultas sobre el posible sucesor. El presidente de Ucrania ha explicado que la medida obedece a que Ucrania necesita "fuerza interna" en un momento clave de las negociaciones sobre un eventual acuerdo de paz. Este viernes se había sabido que agentes de la oficina anticorrupción habían registrado la oficina y la vivienda de Yermak, quien se declaró inocente y se mostró dispuesto a colaborar. Andrí

Yermak, jefe de gabinete del presidente ucraniano, estaba considerado el hombre más poderoso del país después del propio Zelenski. Los registros de este viernes están relacionados con su posible implicación en la supuesta trama de comisiones a contratistas de la empresa pública de energía atómica ucraniana. Esa trama estaría liderada por Timur Mindich, ex socio de Zelenski. Mindich huyó a Israel poco antes de que fueran a apresarlo.

Zelenski anunció también en su discurso a la nación de este viernes que el jefe del Estado Mayor, Andrí Gnatov, y el secretario del Consejo para la Seguridad Nacional de Ucrania, Rustem Umérov, seguirán integrando la delegación ucraniana en la reunión para avanzar hacia un final negociado de la guerra prevista para "el futuro más próximo" con emisarios de Estados Unidos.