La Policía Nacional ha arrestado en Palma a dos mujeres de origen ecuatoriano acusadas de contratar a personas en situación irregular para trabajar en su restaurante, a quienes en ocasiones pagaban únicamente con un plato de comida pese a cumplir jornadas de más de diez horas.

Los agentes de la Unidad Central de Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (UCRIF), que venían realizando distintas inspecciones en las últimas semanas, descubrieron que las dos mujeres mantenían a varios empleados sin contrato y sin documentación legal para residir o trabajar en España.

Según informa Europa Press, en comprobaciones anteriores, los investigadores ya habían encontrado más trabajadores irregulares desempeñando tareas en el mismo establecimiento, según informó la Policía Nacional en un comunicado oficial.

Un plato de comida como sueldo

Durante una primera inspección rutinaria llevada a cabo semanas atrás en un restaurante del centro de Palma, los agentes hallaron a tres empleados extranjeros en situación irregular, sin permiso de residencia ni autorización laboral.

Poco después, en una segunda visita, localizaron a otros tres trabajadores en las mismas condiciones: todos carecían de contrato y de los permisos exigidos por ley.

Tras las investigaciones correspondientes, la UCRIF comprobó que tanto la propietaria como la encargada del local se aprovechaban de la vulnerabilidad y necesidad económica de los empleados para explotarlos laboralmente.

La mayoría de las víctimas eran extranjeros en situación irregular, y varios de ellos no recibían salario alguno, sino que eran compensados con comida tras extensas jornadas de ocho a diez horas diarias.

Ninguno de los trabajadores estaba afiliado a la Seguridad Social, no tenía seguro médico, ni disfrutaba de vacaciones o días festivos, lo que evidenció las condiciones de explotación.

Finalmente, los agentes detuvieron a las dos mujeres como presuntas autoras de un delito contra los derechos de los trabajadores, iniciándose el correspondiente procedimiento judicial.