Tras un año marcado por su confrontación pública y directa con el director de la Real Academia Española, Santiago Muñoz Machado, Luis García Montero parece haber optado por cerrar 2025 en un registro bien distinto. El director del Instituto Cervantes ha cedido la sede de la institución al padre Ángel para acoger la tradicional cena solidaria de Nochebuena organizada por Mensajeros de la Paz, una cita que este año cumple su décimo aniversario.

La cena solidaria se celebra este miércoles en la sede del Cervantes de la calle Alcalá, complementada con otra en la Iglesia de San Antón, centro de operaciones de la organización benéfica. En total, ambas convocatorias atenderán a 180 personas en situación de extrema vulnerabilidad, y contará con la asistencia de voluntarios y representantes del ámbito social y cultural. El objetivo, según subraya la organización, es que nadie pase la Nochebuena en soledad.

"Símbolo de cultura y encuentro"

La iniciativa, impulsada desde hace una década por el padre Ángel, ha ido itinerando por algunos de los espacios más simbólicos de Madrid. En ediciones anteriores, la cena se ha celebrado en el Senado, el Palacio de Cibeles, el Museo del Prado, el Teatro Real, el Casino de Madrid o el palco de honor del estadio Santiago Bernabéu. Este año, el marco elegido es el Instituto Cervantes, presentado por la ONG como un “símbolo de cultura y encuentro”.

“Diez años después, seguimos demostrando que la solidaridad no tiene límites. Gracias al Instituto Cervantes y a su director y equipo que nos acogen este año”, ha señalado el padre Ángel en una nota difundida por Mensajeros de la Paz. La cena, prevista tras una recepción a las 18.30 horas, contará también con la participación directa de García Montero en la bienvenida a los asistentes.

El menú, elaborado por Catering Lecaser, incluye tabla de embutidos y quesos, langostinos con mayonesa de ajo negro, crema de bogavante con zamburiñas y caviar, lechazo asado al estilo tradicional y tronco de Navidad con crema de tiramisú. La propuesta mantiene la lógica de ediciones anteriores: ofrecer un menú navideño completo en un entorno institucional de primer nivel.

Un García Montero 'navideño'

García Montero llega a esta cita tras meses de tensión institucional con la Real Academia Española, reavivada a comienzos de diciembre por sus declaraciones contra Muñoz Machado a propósito de la elección de la sede del próximo Congreso Internacional de la Lengua Española. El cruce de reproches, que se arrastra desde el pasado otoño, ha situado al director del Cervantes en el centro de una polémica que ha trascendido el ámbito académico.

En ese contexto, la cesión del Cervantes para una cena solidaria organizada por el padre Ángel introduce un cambio de tono. No hay rectificación de Montero, pero con su gesto, y con su presencia mañana en la cena solidaria de Mensajeros de la Paz, pretende sin duda proyectar una imagen distinta: la del gestor cultural que abre la institución a una iniciativa social de amplio consenso. Una forma discreta de cerrar el año sin declaraciones, sin réplicas y sin comunicados, en compañía de uno de los símbolos más reconocibles de la solidaridad urbana en Madrid.