La Policía Nacional ha desarticulado a un grupo criminal, con la detención de seis personas, dedicado al robo de máquinas tragaperras en salones de juego, en los que habían obtenido un botín de 180.000 euros en pocos meses.

Según explica la Policía, en la operación realizada en la localidad madrileña de Parla, se ha arrestado seis personas, todas ellas con antecedentes por hechos similares, y se han llevado a cabo cuatro registros domiciliarios.

Tras un año de investigación, los agentes detectaron que la organización era capaz de manipular las máquinas para, a través de un error de software que impedía la activación de alarmas, hacerse con el botín.

El grupo, formado por individuos de nacionalidades rumanas y marroquíes, se había asentado en las provincias de Madrid y Málaga.

Según los investigadores, los componentes del grupo criminal preparaban muy bien los robos, analizando previamente cada máquina, su ubicación dentro del local y el comportamiento del personal, entre los que captaba colaboradores o cómplices a los que compensaban económicamente.

Para el robo manipulaban la máquina, introduciendo un billete y solicitando su cobro, cobraban el bono que emite la máquina en un dispensador de premios y así repetían el proceso hasta completar la capacidad del monedero, que tras forzar la tolva del aparato y se apoderaban de todo el efectivo.