El rey Carlos Gustavo de Suecia ha anunciado una reforma de las arcaicas normas que rigen la Academia del Nobel que cada año otorga el premio de Literatura, después de una cascada de dimisiones que ha tenido como epicentro la figura de Jean Claude Arnault, marido de una de las integrantes de la comisión y acusado de abusos sexuales.

La polémica se ha saldado por ahora con la dimisión de cinco de los 18 académicos, entre ellos la esposa de Arnault, Katarina Frostenson, y la secretaria permanente, Sara Danius. Sin embargo, los estatutos actuales establecen que los cargos son vitalicios, por lo que en realidad seguirían siendo miembros aunque no ejerzan como tal.

El rey sueco, garante último de una institución que se remonta al siglo XVIII, ha informado en un comunicado de su intención de modificar los estatutos para que "sea posible dejar la Academia por petición propia". En la práctica, estos cambios significarán que los huecos vacantes podrán quedar resueltos.

El monarca, que ha apelado a las garantías legales que existen tanto en Suecia como en el resto del mundo, ha defendido la necesidad de emprender estos cambios para que la Academia pueda desarrollar sus "importantes" tareas en el futuro, si bien por el momento la reforma está en fase de consulta.

La polémica

La Academia cortó en noviembre de 2017 toda relación con Arnault, a quien ayudó financieramente a dirigir un club cultural en Estocolmo, después de que se presentaran una serie de acusaciones en su contra por presunto acoso sexual. El abogado de Arnault, Bjorn Hurtig, ha afirmado a la agencia de noticias Reuters que su cliente ha rechazado todas las acusaciones.

La Fiscalía, que ha abierto una investigación preliminar al respecto, indicó en marzo que algunas partes de las pesquisas habían sido archivadas debido a la falta de pruebas.