Jose María Manzanares deberá pisar de nuevo la camilla de operación este sábado para tratarse los problemas de espalda que arrastra desde hace años y que le han mantenido alejado de las plazas de toros. El torero alicantino ha recaído en los dolores lumbares y se ve obligado a poner fin al año de toreo, que ya se vió afectado por la pandemia tras la cancelación de las corridas.

Manzanares acumula así varias operaciones en la zona, que siguen sumándose con la este próximo sábado: acarrea tres en las lumbares (2010, 2015, 2019) y otra en las cervicales.

Durante el mes de julio, Manzanares fue intervenido de una rizolisis, una técnica cuyo objetivo es proporcionar calor por radiofrecuencua a las raíces del nervio lumbar, anulando así el dolor de la hernia que le evita hacer vida normal.

«Las operaciones que llevo consisten en la extracción del trocito del disco que pinza el nervio ciático que produce que se me duerma la pierna izquierda y no me permite ni estar derecho», comentaba el torero a la Cadena SER hace unos meses. «Es una lesión muy molesta, lo he pasado muy mal pero seguiré luchando», añadía.

Este nuevo revés en la salud del torero ha supuesto la cancelación de su temporada en las plazas, pues era precisamente este sábado cuando se presentaba ante el público en la Feria de Nimes.