Eurovisión es un festival que va mucho más allá de la música y que, si bien se centra en las actuaciones, los cantantes elegidos y las votaciones, también cuenta con cierta dosis de polémica que, por qué no decirlo, le viene bien al certamen.

En los últimos años, las habladurías han rodeado a un grupo concreto, el denominado Big Five, que son los privilegiados del concurso, en una nómina a la que pertenece España y por la que tiene acceso directo a la final de Eurovisión sin pasar por las semifinales.

Las reglas de Eurovisión llevaron a la creación de un grupo de cinco países, el Big Five, que tiene un beneficio, en forma de privilegio de acceso a la final sin pasar, de manera competitiva, por las semifinales.

España ocupa plaza en este grupo, igual que Alemania, Francia, Reino Unido e Italia, los cinco países principales de las 37 naciones que participan en Eurovisión en su edición de 2024. 

El sábado 11 de mayo, en la final de Eurovisión, de los 37 países participantes en el certamen, sólo quedarán 26, que son los clasificados para el momento decisivo. 31 países tienen que jugarse el pase en la primera o la segunda semifinal de Eurovisión, pero además del anfitrión, en este caso Suecia, campeona en 2023, cinco naciones, las pertenecientes al Big Five, tienen asegurado también su pase. 

El motivo por el que el Big Five pasa a la final de Eurovisión

La clave a la hora de considerar el motivo por el que los países del Big Five acceden directamente a la final de Eurovisión, está en la Unión Europea de Radiodifusión, en siglas UER, que es la que organiza, de la mano del país anfitrión, el gran festival de la canción a nivel europeo, pero con repercusión nacional, continental e incluso mundial. 

España, Alemania, Reino Unido, Italia y Francia, véase los miembros del Big Five, son los que más colaboran económicamente con la Unión Europea de Radiodifusión para la celebración de Eurovisión y esta les recompensa con un beneficio que es, ni más ni menos, que cantar en las semifinales sin ningún tipo de presión y clasificar a la final de manera segura, donde, ahí sí, competirán de tú a tú y en igualdad de condiciones con el resto de clasificados. 

Los rumores indican que todo empezó como un favor a Alemania, que no se clasificó en 1996 de la semifinal a la final de Eurovisión, si bien el primer año en el que pudimos ver al Big Five en liza fue en 2000, aunque entonces Italia, que se sumó en 2011, no pertenecía a los entonces cuarto fantásticos.

Además del privilegio de acceso a la final, hay otro, desde hace años, que es el de que pueden votar en las semifinales, aunque no participen en ellas de manera competitiva. Todo ello creó un cóctel que hizo renunciar a un país, Turquía, que por esta razón no participa en Eurovisión desde 2013. 

Los cinco países favorecidos

  • España: Nebulossa ('Zorra')
  • Alemania: Isaak ('Always on the Run')
  • Francia: Slimane ('Mon amour')
  • Italia: Angelina Mango ('La noia')
  • Reino Unido: Olly Alexander ('Dizzy')