El banco francés Crédit Mutuel es el caballero blanco que espera Popular para relanzar su negocio, en un entorno incierto para el sector financiero. La entidad gala, uno de los principales accionistas del grupo español con una participación cercana al 4%, busca oportunidades para crecer en España. Y fuentes próximas a Popular aseguran a El Independiente que una operación con Crédit Mutuel sería su opción predilecta, dada la estrecha relación que vincula a ambos grupos desde hace años.

Los dos bancos llegaron a un acuerdo en 2010 para operar conjuntamente en España Targobank. El francés controla el 51% del mismo; Popular, el restante 49%. De hecho, en los términos del acuerdo consta que Crédit Mutuel podría recomprar en cualquier momento la participación del español. Fuentes del mercado aseguran que esta operación tiene opciones de concretarse el próximo ejercicio, aunque el Popular, probablemente, no saldría completamente del accionariado.

Pero la apuesta de Crédit Mutuel por España va más allá de este movimiento de alcance discreto: Targobank cuenta con apenas 125 oficinas y el grupo galo, que gana más de 3.000 millones al año y cuenta con una posición de solvencia cómoda, se fija objetivos más ambiciosos en nuestro país.

Quiere comprar 500 oficinas en España para desarrollar su negocio de banca-seguros

Busca activamente operaciones corporativas y analiza cualquier propuesta que le permita hacerse con una red de en torno a 400 ó 500 oficinas repartidas por todo el territorio nacional. Este medio millar de sucursales podría proceder del Popular, su aliado en el mercado español. No descarta, sin embargo, hacerse con negocios de BMN, Liberbank, Ibercaja o Unicaja, las entidades que más suenan en las quinielas para protagonizar operaciones corporativas. Además, Credit Mútuel está interesada en una plataforma de banca digital.

No es la primera vez que muestra interés por reforzar su negocio en España con una adquisición. A finales de 2014, fue una de las firmas que intentó comprar el negocio de banca minorista de Barclays en la región, finalmente adquirido por CaixaBank por 820 millones de euros.

 En 2014 estudió comprar el negocio minorista de Barclays, adquirido finalmente por CaixaBank

Para articular el proyecto que Crédit Mutuel quiere construir en España, François Martín, director general del grupo asegurador de Crédit Mutuel en España, director general ejecutivo de Targobank y, desde el pasado mes de septiembre, consejero dominical del Popular en representación de Banque Fédérative du Crédit Mutuel, está fichando equipo directivo.

Hace unos meses, Sara Otero, procedente de EY, se incorporó a Targobank como directora de riesgos. Y es previsible que en los próximos meses se realicen más contrataciones, con la mirada puesta en crear un nuevo grupo, especializado en banca-seguros, actividad poco desarrollada en España, en la que Crédit Mutuel es líder en Francia.

Así, en un momento de creciente tensión para el Popular -el lastre inmobiliario consume sus ratio de capital, los tipos de interés en mínimos dificultan lograr rentabilidad y las posiciones bajistas siguen atacando a la acción que cae casi un 70% este año-, Crédit Mutuel entra en la lista de candidatos a hacerse con parte de la actividad del banco español.

El grupo ya está fichando equipo directivo de cara a una futura operación corporativa

Su nombre se une al de otros aspirantes -Sabadell, CaixaBank y BBVA, principalmente-, que han mantenido acercamientos a menor o mayor nivel y han hecho sus números sobre la viabilidad de una operación. Los números, sin embargo, cambian de un mes a otro, bajo la atenta mirada del regulador.

En primavera, el Popular cerró con éxito una ampliación por valor de 2.500 millones de euros. La operación fue respaldada por Crédit Mutuel. Ahora, está en pleno ERE (Expediente de regulación de empleo) con el que dará salida a cerca de 2.600 empleados. Además, planea desconsolidar de su balance activos inmobiliarios por valor de  6.000 millones de euros, que aglutinará en una sociedad inmobiliaria.

Crédit Mutuel cuenta con fondos propios atribuibles por valor de 47.055 millones y ganó más de 3.000 millones de euros en 2015. Sus niveles de solvencia son cómodos, con una ratio de capital Tier one cómoda, de 15,8%. Tiene en plantilla a más de 100.000 personas y presta servicio a 31 millones de clientes, de los cuales más de 28 son particulares.