La noticia sacudió la concentración del Real Madrid en Miami: Kylian Mbappé, flamante fichaje y máxima estrella del conjunto blanco, no participó en el último entrenamiento previo al debut en el Mundial de Clubes contra Al Hilal debido a un proceso febril. 

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Esta ausencia genera incertidumbre sobre su disponibilidad para el esperado encuentro, en el que el club merengue busca reafirmar su hegemonía internacional.

Mbappé, quien se entrenó con relativa normalidad el día anterior, comunicó a su llegada al hotel que no se encontraba bien. El delantero francés, aquejado por fiebre, se ausentó incluso de la comida del equipo, lo que encendió las alarmas en el cuerpo técnico y los servicios médicos del club, según informaron varios medios.

Inmediatamente, el personal sanitario se volcó en atender al jugador, que permanece en reposo en el hotel de concentración.

La situación se ve agravada por las extremas condiciones climáticas en Miami, donde las temperaturas rondan los 30 grados y la humedad alcanza el 75%. 

Estas circunstancias invitan a la prudencia, y desde el club no quieren arriesgar la salud de su estrella, especialmente en un torneo tan exigente. El partido ante Al Hilal está programado para las 15:00 horas, mientras que los entrenamientos se han realizado en la franja matutina para intentar mitigar el impacto del calor.

La fiebre de Mbappé no solo le ha apartado del césped, sino también de actividades institucionales importantes. No pudo participar en la sesión de fotos oficial de la FIFA ni saludar al presidente Florentino Pérez, quien se incorporó recientemente a la expedición madridista. 

Esta ausencia ha generado preocupación entre los aficionados y ha dejado en el aire su presencia en el debut mundialista.

El Real Madrid, consciente de la importancia de Mbappé para sus aspiraciones, mantiene la esperanza de que el delantero pueda recuperarse a tiempo. Sin embargo, la prioridad es no forzar su regreso y garantizar que esté en plenitud de condiciones para los próximos compromisos. El club ya ha enfrentado situaciones similares en el pasado, optando siempre por la cautela para proteger la integridad física de sus jugadores.

En definitiva, la fiebre de Mbappé añade un elemento de incertidumbre al estreno del Real Madrid en el Mundial de Clubes.

La decisión final sobre su participación se tomará horas antes del partido, en función de su evolución y de las recomendaciones médicas. Mientras tanto, la afición blanca permanece expectante, confiando en una pronta recuperación de su gran figura.

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