"Me voy del Real Madrid, pero el Real Madrid nunca se irá de mí". Lucas Vázquez se despide

En una jornada cargada de emociones, Lucas Vázquez puso punto y final a una trayectoria de casi dos décadas en el Real Madrid. Con un mensaje que resume el profundo vínculo entre el jugador y el club: “Me voy del Real Madrid, pero el Real Madrid nunca se irá de mí”, el gallego cerró un capítulo inolvidable en su vida deportiva.

Llegado a Valdebebas en 2007 con apenas 16 años, Lucas se forjó en las categorías inferiores del club blanco hasta proclamarse un pilar del primer equipo. Su evolución, marcada por un paso de extremo a lateral derecho, reflejó siempre su versatilidad, humildad y entrega cuando el equipo más lo necesitaba.

A lo largo de diez temporadas como miembro estable de la primera plantilla, el futbolista disputó 402 partidos oficiales y contribuyó decisivamente al alza del palmarés madridista. Entre sus logros destaca la conquista de 23 trofeos: cinco Champions League, cuatro Ligas, una Copa del Rey, cinco Mundiales de Clubes, cuatro Supercopas de Europa y cuatro Supercopas de España. Cada uno de estos títulos simboliza la constancia y el carácter ganador que siempre demostró.

El adiós oficial llegó con un acto institucional celebrado en la Ciudad Real Madrid, presidido por Florentino Pérez. En una ceremonia íntima pero cargada de reconocimientos, compañeros, técnicos y trabajadores del club expresaron su gratitud y cariño por un jugador que siempre dio la cara y levantó la mano cuando más se le necesitó.

Más allá de sus números, Lucas Vázquez deja un legado basado en el respeto, el compromiso y el espíritu de equipo. Su serenidad al lanzar un penalti en una final de Champions, sus carreras incansables por la banda y su capacidad para adaptarse a diferentes roles le convirtieron en un referente para entrenadores y aficionados.

A sus 34 años, Lucas emprende una nueva etapa profesional fuera del Santiago Bernabéu. Aunque su destino aún no está definido, el jugador parte con la certeza de haberlo dado todo en el club de su vida y con la seguridad de que, allí donde vaya, llevará siempre el orgullo de haber vestido la camiseta del mejor equipo del mundo, según informa Europa Press.