Los cajeros automáticos están experimentando cambios respecto al uso del dinero en efectivo. Aunque los pagos con tarjeta o desde el móvil han crecido en popularidad, el efectivo sigue manteniendo una cierta importancia en la economía de la vida cotidiana. Ahora, gracias a una novedad puesta en marcha por Caixabank, estos terminales crean una nueva función donde facilitar el pago de facturas en metálico y devolver el cambio vía Bizum.

Un paso más en la transformación digital de los bancos

A pesar de la tendencia creciente de los pagos digitales el último informe del Banco de España constata que el efectivo continúa siendo la forma de pago más utilizada en el país. Esto ha llevado a las entidades de crédito a encontrar fórmulas que integren los servicios tradicionales y productos de crédito con las herramientas tecnológicas que la mayoría de los ciudadanos utilizan cotidianamente como es el caso de Bizum.

Esta nueva función permite a los bancos demostrar que pueden actualizar sus servicios y dominar al mismo tiempo el efectivo. Los cajeros automáticos ya no solo son cosa de retirar efectivo sino que tienen la posibilidad de pagar recibos o tasas e impuestos en efectivos, y devuelven el cambio mediante el móvil del usuario desde Bizum. Una forma clara de mostrar que el sistema bancario se adapta a las necesidades actuales pero no abandona el uso habitual.

El primer paso lo da Caixabank

CaixaBank ha sido la primera entidad en apostar por introducir esta funcionalidad en toda su red de cajeros, pero parece que otras entidades tienen la intención de moverse en el mismo sentido en los próximos meses. La facilidad de uso que permite este sistema se convierte en un aspecto muy atractivo para cualquier entidad que pretenda modernizar su red de cajeros y ofrecer soluciones que sean útiles tanto para sus clientes como también para las personas que no son clientes.

Este servicio facilita al usuario pagar un recibo sin necesidad de llevar la cantidad exacta. Tan solo hay que escanear el código de barras de la documentación en el propio cajero, introducir el efectivo y recibir la devolución del cambio mediante Bizum. Una experiencia rápida, cómoda y segura.

Así funciona el nuevo servicio de los cajeros automáticos

El proceso empleado es muy sencillo: el usuario escanea el código de barras del recibo o introduce los datos manualmente en el cajero automático. A continuación, inserta el monto en metálico, y si la suma es superior al importe del recibo, el cajero devuelve el cambio a través de Bizum, teniendo únicamente que estar el usuario registrado en la plataforma.

El sistema no solamente ha conseguido economizar tiempo, sino que también ha logrado descongestionar la fase de recibir billetes y monedas de cambio. Además, es capaz de funcionar 24 horas al día tanto para clientes como para usuarios que no sean de la entidad.

Una solución para quienes siguen usando efectivo

El dinero en efectivo todavía es utilizado por muchas personas en la actualidad, ya sea porque esa forma de pago les hace sentir más controlados a la hora de realizar un gasto o por pura costumbre. La nueva funcionalidad incorpora al servicio de Bizum la posibilidad de pagar de una manera rápida y sin complicaciones, de tal manera que incluso aunque no se tenga la cantidad exacta en billetes o en monedas, el cambio pasa a la cuenta bancaria que haya sido vinculada al Bizum del usuario.

Más entidades se sumarán a esta tendencia

Todo indica que los demás bancos seguirán este camino, sumando a sus cajeros servicios similares. La comodidad, la rapidez y, sobre todo, la seguridad -a la cual no son ajenos los usuarios actuales- son valores que se ajustan como un guante a las necesidades de aquellos que están buscando formas prácticas de poder sacar dinero en efectivo sin renunciar a tener una opción de pagos.