Ha sido la conjunción de dos circunstancias las que han hecho que el precio de los combustibles suban esta semana hasta casi un 2%: la primera operación salida del verano y la crisis en Oriente Medio. Este viernes se inicia la primera gran operación estival en la que se prevén alrededor de 6 millones de desplazamientos hasta el domingo. Los vehículos lo harán con un combustible más caro que días atrás, en concreto con un precio medio del litro de diésel de 1,42 euros y de 1,5 euros en el caso del litro de gasolina.

Según los datos que refleja el Boletín Petrolero en gasóleo se ha incrementado esta semana un 1,78% y la gasolina lo ha hecho de modo más moderado, un 0,8%. El sector ya venía anunciando la posibilidad de que la crisis generada pudiera tener algún tipo de incidencia en los precios. También avanzaba que ante la posibilidad de que la crisis en Oriente Medio pudiera reconducirse, como todo apunta que ha sucedido, los incrementos no se acentuarán mucho más.

Con motivo de la amenaza de cierre sobre el estrecho de Ormuz, por donde circula el 20% del crudo mundial, el precio por barril de petróleo sufrió un repunte, pasando de los poco más de 66 dólares por barril a un pico de casi 77 dólares. En los últimos días la mejora de la situación geopolítica también se ha dejado notar en los mercados y el precio se ha ido moderando hasta rondar los 66 y 67 dólares por barril, un importe similar a los días previos a los ataques de Israel y EEUU sobre Irán y la respuesta de la República Islámica.

Más aún, pese al leve repunte de los últimos días en los surtidores, en los seis primeros meses de este año el precio de la gasolina se ha reducido un 1,3% y el del diésel lo ha hecho en un 1%. Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros de diésel tiene un coste de unos 78,3 euros, unos 3,5 euros menos que en las mismas fechas del año pasado, cuando ascendía a casi 82 euros. Por su parte, para los vehículos de gasolina, llenar un depósito medio (55 litros) supone un coste de unos 82,5 euros, casi unos siete euros menos que en 2024, cuando suponía unos 89,1 euros.

El diésel suma ya 122 semanas por debajo del precio de la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual anterior a la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 hasta mediados de febrero de 2023, cuando se rompió la dinámica. Ambos carburantes continúan lejos de los máximos que registraron el verano de 2022, en julio, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.

Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,639 euros el litro, y de la eurozona, con un precio medio de 1,689 euros. En el caso del diésel, el precio en España también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,557 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,586 euros.