Telefónica ha planteado que los expedientes de regulación de empleo (ERE) mantengan las mismas condiciones que el efectuado en 2024, afectando a empleados nacidos en 1971 o antes, sin descartar la posibilidad de despidos forzosos, según han informado fuentes sindicales.

La oferta se ha presentado este lunes en las mesas de negociación de las tres filiales principales —Telefónica Móviles, Telefónica Soluciones y Telefónica España— y contempla un total de 5.040 salidas. UGT y CCOO han criticado la propuesta en comunicados por separado, cuestionando la falta de garantías para que las bajas no afecten a áreas estratégicas y la inclusión de despidos forzosos.

Según han informado los sindicatos, Telefónica ha planteado que los nacidos entre 1969 y 1971 cobren el 68 % del salario hasta los 63 años (el 38 % entre 63 y 65); los nacidos entre 1965 y 1968, el 62 % hasta los 63 años (34 % entre 63 y 65 años); y los nacidos en 1964 y anteriores, el 52 % hasta los 63 años (el 34 %, entre los 63 y 65 años).

La propuesta incluye, además, una actualización anual del 1 % del salario en el tramo entre 63 y 65 años, la posibilidad de que la familia mantenga el cobro en caso de fallecimiento del empleado, el pago de la seguridad social y del seguro médico, una aportación adicional al plan de pensiones y la cobertura de las cotizaciones mientras el trabajador permanezca en desempleo.

Los sindicatos han subrayado que buscan universalidad en las salidas y la eliminación de la opción de despidos forzosos. Critican que Telefónica no descarte que las 5.040 bajas se cubran mediante despidos obligatorios y que se permita afectar a áreas que no son excedentarias ni críticas.

Fuentes sindicales recuerdan que en el ERE de 2024 la compañía sí incluyó un margen de voluntariedad en zonas críticas, aunque se mantenía la posibilidad de despidos forzosos. Entonces, aceptaron esta posibilidad porque confiaban en que la mayoría de las salidas se cubrirían voluntariamente. La situación actual, explican, es diferente: el número de afectados es mayor y se incluyen trabajadores nacidos en varios años, lo que hace menos probable que las bajas se cubran solo con voluntarios.

Por estos motivos, los sindicatos exigen que se suprima la posibilidad de despidos forzosos de la propuesta actual, insistiendo en que se garantice que todas las salidas sean voluntarias y respeten las áreas críticas de la compañía.